miércoles, 9 de marzo de 2011

UNC 126

18./Capitulo 126.Reacción en cadena.


Una vez pasado el tiempo no quisieron perder ni un instante más .Las tres mujeres entraron en la habitación y lo que vieron les sorprendió. El propio Yener estaba allí, en pie, rodeado por una especie de halo dorado.


-¡Papá!. ¿Qué es eso?,- quiso saber Samra, atónita por lo que veía -.
- No temas nada - la tranquilizó su padre explicándole con una sonrisa -.Esto es mi modo de ir a visitar al emperador. He tenido que regenerar mi cuerpo y mi espíritu y ahora estoy preparado .Pero ahora debo volver a viajar. Así que os pido a las tres que me ayudéis. Calina, tú tendrás que darme energía puesto que necesitaré bastante para mantenerme largo rato .Jilia y Samra os necesito para que estéis al tanto por si se producen novedades aquí o llama alguien; deberéis salir y no permitáis que entre nadie hasta que no os avisen desde aquí.- Yener hizo entonces una ligera pausa y se dirigió a su sobrina -.Y tú Rachel serás mi vínculo telepático. En mi viaje astral no podré comunicaros lo que vea o haga, ni lo que me digan. Tendrás que hacerlo tú. ¿Crees que podrás?.
- Lo intentaré tío Yener - afirmó la muchacha deseando ayudarle con todas sus fuerzas, sin embargo, juzgaba aquello bastante difícil .Su tío pareció darse cuenta de ello y la animó diciendo con tono convencido -.
- Serás capaz, confío en ti .Bueno, ahora debo partir. No os asustéis si no os respondo ni aunque veáis que mi cuerpo queda inerte. Es algo normal en este tipo de viaje.


Las chicas asintieron mirándole atónitas y sin decir más Yener quedó sumido en una especie de inconsciencia que delataba la partida de su cuerpo astral. Éste, efectivamente, se dirigió hacia el palacio Imperial. Allí sin oposición ninguna que pudiese frenarlo atravesó todo género de estancias y medidas de seguridad llegándose hasta las habitaciones privadas del emperador. Lonel dormía sin imaginar que pronto iba a recibir una inesperada visita. La voz de Yener le sacó entonces de su sueño o acaso el emperador no pensara sino que seguía dormido al escuchar la denuncia que este le hizo con tono grave y acusador.

-¡Ay de ti emperador de Yumlaiance que con tu indigno y torpe proceder has dejado la seguridad de tu pueblo en manos de nuestros peores enemigos.!.


Alarmado por estas palabras, Lonel abrió los ojos para quedarse mudo de espanto, ante él resplandecía uno de los espectros que tantas veces en estos años había temido ver.


-¡No puede ser!. ¿Acaso has vuelto del otro mundo para torturarme?,- pudo preguntar lleno de pánico - .
- He venido para darte testimonio de la verdad - respondió Yener añadiendo con severidad - Crucé por grandes extensiones enfrentándome a los muchos peligros que había en ellas para devolver la esperanza a nuestro mundo y, ¿qué me encontré al volver? .A un pueblo que había perdido la mayor parte de sus valores, de su unidad y de su espíritu, entregado a las manos de un sin fin de conspiradores y corruptos .Y tú fuiste quién lo permitió. Te aseguro emperador que las almas de miles de héroes de Yumlaiance de todas las edades en la historia de nuestro mundo arden ahora de indignación.
- Esto es sólo un sueño - arguyó el emperador sin poder, o mejor dicho, querer creer lo que escuchaba de modo que agregó tratando de auto convencerse -.He debido tomar algo que me ha sentado mal.
-¿Acaso sea tu conciencia que te acusa después de tantos años?,- inquirió sarcásticamente Yener a su vez añadiendo -.No, soy yo en verdad, y pronto estaré ante ti, pero no como juez, pues no soy quién para ello, otros se encargarán de eso cuando llegue tu hora, sino como el que desea ayudarte a que Yumlaiance se restablezca en su perdida grandeza. ¡Oye bien lo que te digo!. Recuerda el Abismo profundo de Magasth, allí forjó Yumlaiance su origen y su grandeza, pues allí estará el fin de ella y de nuestro pueblo si tú no te haces merecedor del título Imperial que llevas.
-¿Qué quieres decir?,- le inquirió el sorprendido Lonel sin acertar a comprender nada de aquello -.
- Levanta tu mano y señala a los que han socavado los cimientos de nuestro mundo, después únete a mí en la lucha .Pero antes déjate llevar por mí, para que por tus propios ojos contemples el desastre que se cierne sobre nuestra patria - le indicó Yener -.


Y el atónito monarca se vio a sí mismo flotar, elevándose sobre el techo de su habitación y unido por una especie de invisible lazo a la etérea figura de Yener salió con él del palacio y recorrió enormes distancias hasta aparecer sobre la gran grieta de Magasth .Con los ojos del espíritu pudo ver el emperador como esas nubes negras de tormenta rodeaban toda la zona y como, amparadas en ellas, surgían lentamente los miles de terribles espectros de los que antaño fueran enemigos mortales de Yumlaiance, que emitían algo como una ventisca heladora, congelando al monarca hasta casi su propia alma e incluso desgarrando en jirones su pijama de fina tela. Ciego de terror, pidió ayuda a Yener pero éste le dijo con voz calmosa.


- Desde aquí nada pueden hacerte pero dentro de poco lo harán contra nuestro mundo entero .Torturarán y matarán sumiéndoles en el terror más absoluto a cuantos, hombres, mujeres y niños puedan. Una vez llegados a nuestra dimensión mortal nada podrá pararlos salvo las artes del pasado y la fe en nuestros dioses. Escúchame bien majestad .Pues esto es lo único que puedes hacer para detener tal horror y que tu nombre no pase a la historia como el del soberano que llevó a su pueblo a una masacre aun peor que la de los tiempos anteriores al surgimiento de Skarn Dainlin.
-¡Habla, haré cualquier cosa que me pidas!.- Le aseguró el atemorizado emperador desencajado de horror al escuchar aquellas terribles palabras -.
- Pues bien, en tu calidad de emperador y descendiente por tradición de aquel que instaurase el canto a Maray, yo te pido que convoques otro canto nuevamente, pues el anterior ha perdido todo su poder y efecto al ceder bajo los impulsos de la codicia y el más absoluto de los desdenes. Hazlo y yo .Gavilán Veloz, acudiré hasta ti para dirigirlo y que los dioses Maray, Kail y Alex nos ayuden.


Tras estas palabras Lonel fue nuevamente conducido a su habitación .Estuvo una vez más sobre su cama y ya no vio la figura del monje guerrero que había desaparecido como si jamás hubiera estado, aunque seguía tan asustado aun que ni siquiera el pensar que hubiera sido un sueño le disuadió de gritar llamando a los guardias del palacio. Estos se personaron inmediatamente en la estancia junto el jefe de protocolo y el aturdido y desencajado emperador les instó entonces con vehemencia.


-¡Pronto!,¡ haz llamar al presidente y a todos los ministros!, ¡convoca reunión de urgencia!. ¡Ahora mismo! .Y quiero que el ejército se movilice hacia la Garganta de Magasth .Que los magos de Esil y los Señores del Kail tomen el control de todo.


Los atónitos guardias se miraban sin poder creer lo que escuchaban en tanto que el veterano jefe de protocolo trató de calmar a su emperador diciendo con serenidad.

- Mi señor, sosegaos, creo que habéis sufrido una pesadilla..


Pero el emperador tocándose entonces por todo su cuerpo descubrió, al igual que el resto de los atónitos presentes, que su pijama estaba roto por numerosos lugares y aquello aun le aterró más si cabe, haciéndole volver a exclamar con un tono que casi rayaba en la desesperación.

-¡Soy tu emperador!. ¡Haz lo que te ordeno!, les quiero a todos aquí en menos de dos sexdanes y haced venir al maestro del Kail Gavilán Veloz .Ha sido él quién me ha advertido de esto.
-¿Gavilán Veloz, Señor?.- Se sorprendió el jefe de protocolo que se atrevió a oponer con un suave y más alarmado tinte de voz -.Pero si hace años que murió majestad.
-¡Obedece mis órdenes pronto! - le exigió el emperador que ahora tornaba su pánico en cólera por aquellas palabras -.
- Si majestad - musitó su sorprendido e inquietado interlocutor no queriendo irritarle aun más, saliendo de las estancias Imperiales seguido por los atónitos guardias -.


Lonel se vistió a toda prisa con su uniforme militar de gala el que le acreditaba como Comandante en Jefe de los ejércitos e incluso con la capa verde honoraria de los Señores del Kail, más al punto se quitó la misma en tanto pensaba con amargura.


-<>.


Y el Emperador fue tan duro consigo mismo no sólo por esa extraña pesadilla que le vinculaba con la dura realidad, sino por mucho tiempo de meditación y una progresiva madurez. Siendo joven todo era distinto y cuando tan sólo era un príncipe ambicioso que jugaba a coquetear con las clases ricas e influyentes de su mundo todo le parecía fácil de llevar .Se sentía seguro siendo el hijo del emperador y pensando en cuantas cosas haría una vez en el poder. Por otro lado siempre mantuvo animadversión contra el Kail y la Orden de Esil a quienes había considerado caducos defensores de valores trasnochados, aunque, y siendo sincero consigo mismo, fue su propia torpeza y falta de talento en sus primeros años de adiestramiento los que comenzaron a labrar esa intolerancia. Lonel creció sabiéndose muy inferior en cualidades y dotes a muchos hombres valiosos que rodeaban a su padre ,sobre todo los miembros de ambas instituciones y en el fondo les odiaba pues creía que ellos a su vez le despreciaban por su poco talento .Finalmente con el encumbramiento del general Rant llegó a la cima de su antipatía, haciendo blanco a Yener de toda su tirria al ser el mayor exponente de aquellos que, en su opinión, le humillaban casi a diario en todo tipo de eventos en los que coincidía. Además, ese general se había ganado tanto el aprecio de su propio padre que Lonel temió llegar a ser una simple marioneta en sus manos y en las del resto de sus compañeros .Por ello se volcó desde muy temprano en los que, como él, despreciaban esos estúpidos ceremoniales y esas rígidas normas de proceder tanto como los duros entrenamientos de los que magos y monjes hacían gala .Después se dio cuenta de que aquellos especuladores que tanto apoyó se habían servido también de él para hacer lo que les venía en gana. Sobre todo Child y su gabinete de políticos disolutos que, en su mayor parte y salvo pocas excepciones, miraban tan sólo por su interés hipotecando a Yumlaiance en manos de sus enemigos.


-<> - se decía a sí mismo con rabia y frustración -.


Y en eso también estaba en lo cierto. Su padre murió y aquello pasó de largo pese a las sospechas más que evidentes de que pudo ser algo más que un trágico accidente .Lo mismo que el general Rant. Pero Tonel, en el caso de Yener, casi pudiera decirse que se alivió en parte cuando este desapareció, aunque allí comenzó también a encenderse la pequeña llama del remordimiento que fue avivándose hasta el gran fuego que ahora ardía en él .Y la muerte posterior de su padre contribuyó decisivamente a esto .Al principio no pensó en un posible complot, después no quiso profundizar mucho, si le ocurrió a su padre podría pasarle a él .Pero claro, antaño el emperador gozaba de la protección capaz de Esil y del Kail, que, dicho sea de paso, el gobierno de Child se había encargado de ir minando, gracias en buena parte al propio Lonel .Finalmente él mismo acabó siendo un “emperador – títere” como en tantas ocasiones había dicho de su propio padre. Ahora estaba seguro de que éste estaría sin duda junto a aquellos espíritus indignados de los grandes hombres de Yumlaiance a los que se había referido el general Rant.


-<<¿Y ahora qué?. ¿Podré todavía remediar el daño que hice?>>,- se preguntaba el emperador una vez terminó de vestirse -.


Y sin que nadie pudiera por el momento ofrecerle una respuesta salió directo hacia el salón del trono. Paralelamente a esto el presidente Child y su gobierno fueron despertados e informados puntualmente por el jefe de protocolo imperial. El veterano presidente enseguida se puso en camino charlando con éste vía holocomunicador con un tono entre distendido y tranquilo que daba fe de su dominio de la situación.


-Tranquilícese señor jefe de protocolo - decía despreocupadamente -.Nuestro soberano ha tenido un mal sueño, eso es todo .Aunque si él cree que existe cualquier tipo de amenaza para nuestro mundo nunca está de más convocar al gobierno, ha hecho lo correcto.
- Estaba muy alterado - le respondió su interlocutor con preocupación -.Nunca le he visto de ese modo.
-Todos tenemos días malos - replicó Child con tono condescendiente -.De todos modos enseguida estoy allí y hablaré con él. No tema, enseguida le haré entrar en razón.- Añadió el presidente cerrando la emisión -.
- Cuento con ello - suspiró aliviádamente el jefe de protocolo que también dio por terminada la comunicación -.


Child en cambio, estaba más preocupado por esas noticias de lo que pretendía hacer ver .Una vez pudo se puso en contacto con uno de sus ministros, Rowel, el de asuntos internos, y le indicó.

- Lonel está algo nervioso, últimamente no es que haya sido un hombre tranquilo que digamos, no nos ha hecho falta para nada, ha dejado hacer como siempre, pero ahora se debe de creer imbuido por un arrebato de misticismo. Tendremos que ponerle en su sitio y evitar que complique las cosas.
- Si señor presidente - repuso el ministro que quiso saber con prevención -.¿Pero qué haremos con él si persiste en una actitud ,digamos improcedente?.
- En tal caso deberá ser atendido en algún centro especializado .Ya sabe, pero con discreción absoluta .De todos modos, no se prodiga demasiado en actos públicos.
- Señor presidente, ha dado orden de movilizar al Kail y a los magos de Esil - le informó gravemente su interlocutor -.
- Tendremos que revocar eso - dijo pensativamente Child -.
- Pero no podemos hacer eso si es una orden personal del emperador.- Objetó Rowel -.
-¡Eso ya lo sé!.- Replicó Child con un tono bastante menos amable y crispado que el usado hasta el momento -.Por eso estoy pensando en lugar de darte órdenes para que lo impidas.
- De todos modos ,¿a qué preocuparse?. Los del Kail y los de Esil pensarán que se trata de otra de sus extravagancias para dejarles en ridículo. Quizás ni le presten atención.- Comentó más despreocupadamente el ministro -.
- No harán tal cosa - rebatió Child que expuso con inquietud y desdén -.Esos necios viven tan apegados a sus tradiciones y deberes que no van a ignorar una orden directa de su emperador, a quién han jurado lealtad incondicional. Y nuestros partidarios en ambas Órdenes todavía no son lo bastante poderosos como para influir abiertamente .Mejor será que los movilice, no sé contra qué o contra quién pensará enviarlos pero será bueno enterarse y que eso se tome como indicio de inestabilidad mental que le cave la fosa. ¿A quién se le ocurre decir que todo esto le ha sido indicado por el general Rant?. Está claro que debe de haberse vuelto loco.
-¿Y en cuanto al ejército?- inquirió Rowel -.
- Eso es más sencillo - replicó Child nuevamente calmado - .Déjame a mí el hablar con los altos mandos, esos si que están de nuestro lado .Llevamos años influyendo para que asciendan los que nos son afines y con la ayuda de nuestros amigos hace tiempo que controlamos la mayor parte del estado Mayor. No será difícil persuadirles de que ha sido una falsa alarma. No se moverán .Además. Ocurre igual que con los monjes y los magos. ¿Contra quién iban a moverse?. ¿Contra las pesadillas de un desequilibrado?.- Expuso el presidente con tono más despreocupado -.
- Tiene usted razón, como de costumbre - le otorgó su complaciente ministro con alivio -.
- Muy bien - contestó Child que parecía haber madurado una idea -.Por el momento nos interesa que la gente se mantenga quieta, por si sucediera algo que escapase a nuestro control. No necesitamos que haya alboroto en las calles caso de producirse un incidente en palacio. Mantenga a la población, sobre todo a la de Yum y zonas circundantes en sus casas. Invéntese cualquier excusa .¿Ha comprendido?.
- Si señor presidente, así se hará - repuso su interlocutor -.


Y Child asintió satisfecho, dando por terminada la conversación al apagar el transmisor, su vehículo estaba a punto de llegar a palacio, estaba seguro de que ,con unas pocas palabras suyas las aguas volverían a su cauce y que el débil y estúpido emperador seguiría siendo un dócil colaborador de sus intrigas.


Entre tanto, Halcón Certero había llegado a su Monasterio pidiendo hablar con su superior .Aduciendo una causa muy grave fue recibido por Dogo Valiente quién era ahora el máximo responsable del Kail. Hombre que rayaba los setenta años, era aun muy dinámico y audaz pese a su edad, de constitución robusta y muy versado en las antiguas tradiciones, estaba bastante predispuesto contra el gobierno y aquel emperador de pacotilla que tanto habían humillado a los de su orden. Por ello, en cuanto Halcón Certero le mostró a él el Diamante del Tránsito y le contó lo sucedido, dio un golpe sobre una mesa cercana y exclamó lleno de júbilo.


-¡Alabado sea el Dios Kail!. ¡Al fin nos ha mostrado un rayo de esperanza!. Te seguiremos Halcón Certero y al Gran Maestro también. Los monjes guerreros de Somer reconocen esta joya y su poder .Yo, solo con sentir sus vibraciones, sé que al traerlo dices la verdad. Estaremos allí donde nos lo pida aquel que te envía. ¿Qué se saque el Estandarte de la Guerra de los Monjes de Somer!-. Ordenó a los suyos una vez salieron de la habitación -.


Casi todos los monjes que conformaban la más alta jerarquía quedaron sorprendidos por todo el creciente revuelo que invadió su normalmente tranquilo Monasterio .Uno a uno fueron puestos al corriente y la mayoría de ellos acordó con el mismo entusiasmo que su jefe aquella movilización. Aunque algunos pocos eran reticentes a ello, no obstante por el momento no podían oponerse a la marea desatada, sobre todo cuando en apoyo de las palabras de Halcón Certero llego a su vez la orden imperial de movilización y el joven monje sonrió lleno de júbilo pensando

- ¡Gavilán Veloz lo ha conseguido .Ahora tenemos la oportunidad de vencer!..


Lo mismo sucedió en Esil cuando Dilain, en su condición de Maestre, ordenó primero a los miembros de su sede y después al resto de las distintas legaciones de Yumlaiance que se preparasen para salir en misión de combate .En un principio las caras de todos expresaron sorpresa y asombro. Algunos incluso sonrieron considerándolo un simulacro, pero Dilain se encargó pronto de quitarles esas ideas de la cabeza....


-¡A Magasth!- ordenó sin tardanza -.
- Señor - le informó uno de sus lugartenientes con sorpresa y regocijo -.Ha llegado una orden imperial por su canal privado.


Dilain no quiso en un principio prestarle atención puesto que juzgaba posible una indicación contraria a sus propias medidas, pero tuvo que hacerlo para no crear disensión entre los suyos al enfrentarse a un posible dilema de lealtades, era lo último que necesitaban entonces. No obstante, al conocer su mensaje su normalmente serio rostro se iluminó con una amplia y alegre sorpresa y comunicó a los suyos con rotundidad.


- Es el propio Emperador quién también nos ordena a nosotros y a nuestros hermanos del Kail que nos movilicemos rumbo hacia Magasth. ¡Adelante pues magos de Esil .Acudamos a la llamada de nuestro soberano!....


Y en tanto el júbilo se desataba entre los suyos Dilain pensó animadamente al igual que antes lo hiciera Sert.

-<>.


Entre tanto y al parecer ajenos a ellos, dos personas aguardaban en el santuario de Alasir. Navilia estaba allí desde hacía un buen rato y después del mensaje de la diosa Alasir sintió que alguien trataba de entrar. Bajó cautelosamente para comprobar de quien podría tratarse y se quedó muy sorprendida pero, sin embargo contenta, al descubrir a Gali. El muchacho venía vestido con su ropa informal y portaba una especie de mochila. Ella le abrió enseguida y ambos se dieron un largo beso que se interrumpió cuando la nephraler, separándose de su abrazo, le preguntó.


-¿Qué haces aquí a estas horas?.
- Estaba preocupado por ti - le comentó él -.He escuchado un boletín especial en la holotele, más bien no podía dormir y me entretenía viéndola cuando lo han dicho .Estamos en estado de alerta. Y han hecho hincapié en que, sobre todo, afectará a los de tu raza.
-¿Cómo?.- Inquirió ella atónita- .Claro - dijo reflexivamente con una especie de conocimiento de causa que no podía explicar - .Es normal. Lo han conseguido después de todo, han despertado la conciencia de vuestro soberano.
- No te comprendo - le dijo Gali extrañado a su vez de las palabras de Navilia -.
- Ya lo entenderás - le aseguró ella con voz amable y con ese mismo tono le pidió -.Por ahora quédate aquí, sería arriesgado que salieras .Estaremos seguros en este santuario.


Gali convino en ello todavía sin comprender lo que pasaba, el caso era estar junto a Navilia, estaba enamorado de ella aunque esa muchacha le seguía pareciendo misteriosa y exótica, pero ahora algo le decía que podía confiar plenamente en ella. Aunque no tuvo tiempo de seguir pensando en eso ya que la puerta se abrió dejando entrar a la coronel Draker que estaba a su vez al corriente de lo que estaba sucediendo gracias a la holopantalla de su deslizador .Pero no entró sola, tras ella aparecieron Nerel y Seilin y otra persona más que no era sino...

- Adelante Milord - le ofreció ella al darse cuenta de que todo estaba en orden -.


Carnalsk, pues era él de quién se trataba, traspasó el umbral de la puerta a grandes pasos, se detuvo en medio de la entrada y declaró para todos los presentes.

- Ha comenzado, ya nada puede pararlo. Ahora tan sólo debemos saber quién llegará primero.


Tanto Gali como Navilia le miraron absortos y sobre todo en el caso del muchacho, impresionados, aquel tipo desprendía una especie de fuerza misteriosa, como si de un aura mágica se tratara y su voz parecía retumbar por toda la sala. Yashira entonces le preguntó sintiéndose todavía algo confusa.


-¿Qué debemos hacer pues Milord?.
- Esperar - fue la lacónica respuesta que recibió -.
-¿Qué pasará entonces con Yener y los demás?.- Le preguntó Asety con un tono no demasiado preocupado, aunque el nataclier lo estuviera mucho más por la suerte de sus amigos y aliados de lo que pretendía hacer ver -.
- Es su mundo y es su batalla - sentenció Carnalsk que añadió -.Estamos en un santuario consagrado y protegido activamente por Alasir, que ahora se halla en uno de los bandos, cierre la puerta coronel Draker. Tengo que comunicarles algo.


Yashira se apresuró a obedecer y tanto ella como los demás aguardaron con impaciencia las palabras de Lord Carnalsk…


Y volviendo a la casa de Yener, éste había regresado de su viaje astral y tanto él como Calina se encontraban muy debilitados .Rachel, mediante su telepatía, había transmitido todo lo sucedido a la maga, a su prima Samra y a la comandante Renar. Estas dos últimas todavía custodiaban la puerta .Ahora fueron vueltas a llamar .Yener les había indicado por medio de su sobrina que conectasen la holovisión y en ella fueron testigos de la noticia de urgencia que también había sorprendido y preocupado a Gali. Esta decía.


- “Se ha impuesto el estado de alerta preventiva, todas las personas deberán mantenerse en sus casas sin salir de ellas hasta nuevo aviso .Pese a todo no hay por qué alarmarse. Se trata de una medida de pura protección ante una posible tormenta cósmica cuyos rayos pasarán rozando nuestro planeta, los mismos podrían ocasionar molestas quemaduras, sobre todo para gentes de raza nephraler, menos acostumbradas a sus efectos. Se les avisará en breve cuando sea completamente seguro para su integridad el salir, entre tanto, nuestras fuerzas especiales y otros cuerpos de elite se ocupan de todo, gracias por su cooperación”.


-¿Qué significa eso?,- quiso saber Samra mirando a su padre que estaba recuperándose con la ayuda de la también agotada Calina -.
- Que tratan de evitar jaleo - replicó Yener que sudaba copiosamente en tanto sus disciplinas trabajaban para reponerle con rapidez según él explicaba -.No quieren a nadie en circulación .Tan sólo a los que les interese eliminar sin testigos si llegara el caso. La cosa ha empezado y vamos contra el reloj. Pero por una vez han hecho lo adecuado, nos favorece que mantengan a la gente en sus casas.
- Todo saldrá bien, estoy convencida - animó Jilia que lucía un brillo de esperanza y deseo de pasar a la acción en sus ojos -.
-¡Creemos en ti papá. Tú salvarás Yumlaiance!.- Comentó Samra con admiración -.


Pero Yener negó suavemente con la cabeza y sonrió acariciando las mejillas de su hija para rebatirle con suavidad y afecto.


- No hija, será Yumlaiance la que tenga que salvarse a sí misma. Yo ya he cumplido casi por entero mi misión. Serán las personas que viven en este mundo, gente como tú, tu hermano, o Rachel, las que deberán estar dispuestas a luchar y pedir por la victoria. Sin su pueblo, nuestro mundo no podrá ganar. Pero yo tengo fe, tengo esperanza en la capacidad de todos vosotros.
- No te defraudaremos papá - .Le aseguró la muchacha con emoción -. ¡Estoy dispuesta a todo!.



Y Rachel, aun a pesar de no ser yumlaincer, también lo estaba, más que dispuesta a cualquier cosa que de ella se exigiera, entabló a su vez contacto telepático con su madre y ambas se cruzaron información. Kyra había podido notificar lo sucedido a personal de su confianza en la embajada de Oumeya ayudada por su cuñada Gina, ésta también comunicó con Dreland y apenas si pudo contarle más que Yumlaiance entera estaba sumida en una peligrosa crisis. El embajador de Ciloner prometió llamar a su vez a su propio gobierno en tanto ofrecía toda la ayuda que como aliados pudieran dar. Los natacliers ya estaban persuadidos por Nerel .Los Akapler y demás aliados fueron asimismo informados por Gina, Peter y su esposa. Por todas partes había sonado la alarma, no obstante eran bien pocos los que en realidad sabían a que se debía. Aunque aquella situación variaría muy pronto pues las fuerzas del mal se fortalecían a cada segundo, disponiéndose en breve a lanzar su terrible ataque.

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