UNC 17

Capitulo 17.Primeras medidas.


En la flota de la alianza planetaria todo era ahora optimismo y alborozo. Se había cumplido el objetivo, rescatar a todas las personas del planeta y escapar a tiempo de la destrucción del mismo. Aunque entre las evidentes caras de alegría y satisfacción Yener se encontraba pensativo. Ojalá que sus amigos estuviesen también camino de casa .Él en parte se sentía culpable de haberles dejado pero sabía que tampoco había tenido ninguna opción a ese respecto. Las naves entre tanto, volvían hacia Oumeya a gran velocidad, deseosas de instalar a los refugiados y en la mayor parte de los casos, repatriarles a su mundo de origen, Casiopenae .Esto a su vez traería nuevos problemas. Por una parte., Casiopenae seguramente recriminaría a la confederación el meterse en asuntos internos de su planeta y ésta a su vez censuraría las graves violaciones de los derechos humanos y universales que habían quedado patentes merced al reconocimiento de la zona y el estado de los supervivientes. Graham pensaba en eso mientras contactaba con su superior y amigo Pier.

-Entonces .¿No han existido problemas comandante?.- Le preguntaba Pier con un talante bastante animado -.
-Todo ha ido perfectamente- .Corroboró Graham con satisfacción -.Volveremos a Oumeya en cuestión de horas y desembarcaremos a los refugiados, tendréis que habilitar alojamientos a tal efecto .Son muchos.- Advirtió preocupadamente -.
-Quizás no podamos acoger a todos, pero se hará todo lo posible, ¿cuántos son?.- Quiso saber Pier -.
-Aproximadamente treinta mil.- Calculó Graham para desesperación de su amigo -.
-No podremos atender a tanta gente, la mayoría tendrán que quedarse en las naves.- Declaró Pier que compartía la gravedad del problema -.
-Será algo complicado- repuso Graham -.
-Lo hablaré con Lora, supongo que convocará una reunión de urgencia. Yo, por mi parte llamaré a todas las naves hospital y de transporte.
-¡Suerte amigo! - .Le deseó el comandante Graham comprendiendo de sobra que aquella papeleta no era nada fácil de solucionar -.


Pier despidió la comunicación y corrió a llamar a su mujer. Lora se encontraba con su hija, en la casa de los Larans, ambas charlaban sobre temas cotidianos. Esa era una de las pocas ocasiones que tenían de conversar como madre e hija más que como presidenta y subordinada.

-¿Qué tal te va con Gordon?.- Le preguntaba Lora -.
-Bien mamá- respondía Gina que sin embargo no parecía tener un tono demasiado alegre -.Espero que vuelva bien de esa operación de rescate.- Añadió con cara de circunstancias -.
-¡Claro, no temas!, ¡saben lo que hacen! .Tu padre estará ahora en la sala de mando recibiendo noticias, no creo que tarde en llamar. Pero vamos a dejar esos asuntos ahora. - Replicó su madre que pretendía así tranquilizarse también a sí misma pues estaba deseosa de recibir esas noticias. Aunque Lora conocía bien a su hija e intuía que a esta le inquietaba algo más, así que añadió con tono perspicaz -. ¿Sabes?, no te noto demasiado contenta.
-Estoy preocupada, nada más- .Respondió Gina con una media sonrisa que resultaba evasiva- .En cuanto estén aquí será distinto.
-¿Seguro?.- Inquirió intencionadamente Lora que notaba alguna cosa más en el decaído ánimo de la muchacha -.Te he notado ausente en estos últimos días, hija.
-Será por que tengo muchas ganas de salir bien de mis exámenes de acceso al cuerpo diplomático.- Replicó ella con escasa convicción -.
-Ha sido una decisión importante- .Reconoció su madre -.A ti te gustaba mucho tu carrera en la patrulla espacial...
-Si, pero aun me atrae más la perspectiva de una carrera como la que has hecho tú- .Sonrió Gina, ahora de modo más sincero -.Quizás no llegue a presidenta, pero puedo ser embajadora y con los nuevos mundos que se han incorporado a la Confederación...
-Ser agregada o quizás incluso embajadora en Yumlaiance no estaría mal, ¿verdad?.- Preguntó su madre con una clara malicia que no se molestó para nada en ocultar- .

Por unos instantes Gina se quedó sin saber que decir, aunque se rehizo inmediatamente para contestar.

-No, desde luego que sería un buen destino. Ese mundo o los otros que conforman su alianza.
–Bueno - .Repuso Lora con un tinte menos incriminatorio -. He dicho Yumlaiance porque tú ya conoces al Embajador de ese planeta y te ha contado bastantes cosas de su mundo.

Su hija asintió y Lora creyó ver como se sonrojaba ligeramente, no le dio tiempo a confirmar esa impresión con un comentario pues Gina le dijo.

-Así es, me contó muchas cosas si y una de las que más me gustó fue la leyenda del origen de su mundo.
-¿Ah sí?. ¡Pues cuéntame! - .Le pidió Lora visiblemente interesada, por lo menos matarían el tiempo hasta saber algo de la misión de rescate -.

Su hija asintió con una media sonrisa, tomó aire y dijo.

-Verás. Según me explicó, hace muchos, muchos milenios todos los habitantes de su Cuádruple Alianza de planetas vivían en uno común. Fueron puestos en ese mundo por el Creador que los hizo nacer allí y los encomendó a la diosa Maray que junto al Dios Alex tuvieron un hijo llamado Kail. Éste guió a los primeros hombres en el arte de la sabiduría y el coraje guerrero para defenderse de las tentaciones de los seres oscuros.
-¿Los seres oscuros?.- Inquirió Lora sorprendida -.
-Si, unos seres impuros que recorrían el espacio en eterno destierro al no querer seguir los dictados del Creador. Maray y Alex estaban encargados de proteger a los humanos hasta que estos pudieran hacerlo por sí mismos .Por ello, Kail creó las disciplinas que llevan su nombre y adiestró a los hombres en su conocimiento.- Explicó Gina que añadió - .Pero sucedió que los hombres se multiplicaron en exceso y los seres oscuros se infiltraron entre ellos, al ser tan numerosos eran difícilmente controlables. Kail entonces llamó en su ayuda a otros dioses que se llevaron cada uno a un gran grupo de humanos, los depositaron en diversos planetas que colonizaron como propios y así separaron sus caminos hasta el día en que pudieron volver a contactar merced a los viajes espaciales. Kail, llevó a una parte de estos al mundo conocido como Magmund y los humanos allí llevados lo subdividieron en reinos y países .El reino de Yum, el de Somer, el de Anlad, el de Tibinco y algunos más que no recuerdo ahora.
-Parecido a la Tierra- comprendió Lora -.Eran diferentes países.
-Sí, así es.- Asintió su hija que prosiguió- .Durante muchos años, esos reinos medraron e incluso lucharon entre sí. Pero, pese a todas las precauciones que los dioses habían tomado algunos seres de la oscuridad lograron colarse en los grupos de humanos que Kail había llevado al nuevo planeta, en el mundo de Magmund se refugiaron tras unas altas colinas, que se llamaron las colinas oscuras. Fundaron una nación llamada Helgad y proliferaron reuniendo fuerzas en tanto los demás reinos competían por la supremacía. Por fin, cuando creyeron que tenían poder bastante atacaron a todos los reinos restantes, en un principio fueron derrotados y se retiraron .Kail, el dios protector de Yumlaiance, no pudo intervenir a favor de los hombres pues estos debían defenderse por sí mismos .Lo hicieron gracias a la sabiduría aprendida de su dios y de otras deidades. Un hombre, un monje Guerrero, llamado Kar Alan, fue el encargado de fundar el monasterio del Kail. Gracias a ello pudieron derrotar a los seres oscuros. Después, los reinos prosperaron e incluso la mayoría de ellos firmaron tratados de paz y alianzas, así durante casi mil años. Aunque en ese tiempo, el derrotado ejército de las Tinieblas se reorganizó y volvió a atacar con mucha mayor fuerza. Sabían que los monjes del Kail era la mejor defensa de la alianza de los reinos y en un ataque sorpresa masacraron a todos ellos menos a uno, llamado Skar Dainlin .Este tuvo que sufrir muchas peripecias hasta conducir, años más tarde a su reino, el de Somer, a la victoria junto con sus aliados. Derrotaron definitivamente a esos malvados seres y destruyeron su reino .Cuenta la leyenda que los señores de la Oscuridad supervivientes reclamaron la ayuda de las fuerzas el Caos que les sacaron del planeta, a ellos y a otros como ellos que vivían en los distintos mundos y les llevaron a otro que colonizaron, el mundo de Nephraler que, en idioma del caos, significa el mundo de los Oscuros...


-Vaya, es una leyenda bonita pero algo larga- .Opinó Lora -.Y te las has aprendido bien. - Agregó con una divertida sonrisa -.
-Si, Yener es un buen narrador de historias, lo cierto es que me gustaría ir alguna vez a su planeta para ver esos sitios.- Respondió Gina con timidez -.
-Ya me imagino hija- .Convino su madre -.


En esto estaban cuando llegó Pier, saludó de pasada a su hija y a su esposa y sin esperar respuesta les contó lo que ocurría.

-Convocaré una reunión de emergencia- .Declaró la más que inquietada Lora, confirmando las previsiones de su marido -. Es necesario actuar deprisa. Gina hija, necesitaré tu ayuda.
-Si mamá, digo presidenta.- Rectifico azorada ante la sonrisa de su padre, con lo que estaba claro que aquella charla entre madre e hija había tocado a su fin -.


Los tres se pusieron en marcha, tenían muchas cosas que organizar .Ajenos a esto Peter y Kyra se preparaban para llegar al mundo que tenían más cercano, de seguro que tendrían que sufrir un aterrizaje de emergencia.

-¡Abróchense los cinturones y los anclajes magnéticos!- .Ordenó el capitán- .Vamos a entrar en el campo gravitatorio del planeta.- Y una vez lo hicieron añadió dirigiéndose a Peter -. ¿Puede su robot volver a reconectar los sistemas de escudos?, los vamos a necesitar.
-Non,- Inquirió este con la misma expectación que el resto -.¿Puedes volverlo a hacer?.
-Si, no es problema- .Repuso el robot -.Pero queda muy poca energía .No creo que los escudos resulten demasiado eficaces así que extremen las precauciones para el choque.


Todos asintieron aunque un tanto más aliviados al tener la protección de las pantallas, por mínima que fuera algo les ayudaría. De este modo en tanto se amarraban a sus asientos cada uno musitaba una silenciosa oración. .La nave caía ya, cada vez a mayor velocidad hacia el mundo que la atraía inexorablemente pese a que los motores trataban de contrarrestar el vertiginoso descenso .Los traqueteos que la sacudían eran cada vez más bruscos y a todos se les agitaba el estómago amenazándoles con vomitar, aunque eso era lo que menos les preocupaba, pues ese riesgo se atenuaba grandemente al estar este órgano contraído por el temor y la tensión del choque. En la pantalla podía verse el planeta cada vez a mayor tamaño, después la reentrada con las nubes de la atmósfera que atravesaron en tan sólo un segundo. Los sistemas de frenada de la nave se veían impotentes para evitar la caída e incluso para frenarla en su mayor parte. Por fin Non conectó los escudos, al menos paliarían algo del choque.

-Timón elevado, ¡levanten el morro todo lo que puedan! - .Ordenó el capitán Smitz explicando lo que ya todos entendían -. Tenemos que evitar caer de bruces.


La nave pudo elevarse unos grados que resultaron providenciales para ofrecer mayor resistencia a la caída .Los kilómetros respecto del suelo dieron paso a los metros, pronto pudieron observar que se dirigían hacia una llanura terrosa.

-Por lo menos el material es blando.- Pudo decir Kyra tratando de dominar el estrés del momento -.
-Ya nos queda poco- .Advirtió Peter que tendió su mano hacia la de ella, la muchacha se la estrechó con fuerza y ninguno dijo nada ya -...

Los más cerraron los ojos apretando los dientes y rogando a todos los dioses que les protegieran. Todo fue muy rápido y apenas hubo tiempo a sentir el golpe, la nave tomó contacto con la tierra con estrépito. Por fortuna fue la parte baja del fuselaje la que chocó primero haciéndola rebotar .Los escudos sirvieron para evitar que se partiera en dos y los cinturones y anclajes evitaron asimismo que los ocupantes salieran despedidos. Tras recorrer centenares de metros por la inercia, el carguero se detuvo dejando tras de sí un enorme surco de tierra calcinada por la fricción. La mayoría de los ocupantes de la nave habían quedado inconscientes .Entre ellos el capitán y todos los que estaban en el puente de mando. Tan sólo Non se mantenía activo, su bien diseñado cuerpo y las medidas de protección habían reducido sus desperfectos a los mínimos. No se podía decir lo mismo de la sala de mandos de la nave, convertida ahora en varias carcasas destrozadas y multitud de cables desparramados a su alrededor .No obstante, el impertérrito robot procedió a examinar las constantes vitales de los humanos y cuando se aseguró de su buen estado general, reanimó a Peter y Kyra en primer lugar.


-¿Qué ha pasado?.- Pudo susurrar Peter que fue el primero en recobrar el conocimiento -.
- Han sufrido un impacto considerable a varios Ges,- repuso Non -.Por fortuna la protección combinada de los escudos, anclajes y el fuselaje de la nave les han salvado.
-¿Alguna baja?- .Inquirió Peter tratando de otear en derredor de aquel caos -.
- Por ahora no,- contestó el robot reanimando mientras a Kyra -.
- Estamos bien, ¡menos mal!,- pudo suspirar ella aun bajo los efectos del golpe -.
- Non, reanima al resto de la tripulación.- Le indicó Peter y este así lo hizo -.


Pasados unos minutos la oficialidad del puente estaba ya consciente, sus condiciones iban desde los golpes y magulladuras leves hasta los estados de gravedad. Entre estos se encontraba el capitán. Con fractura de clavícula y otros golpes no estaba en condiciones de mantener el mando. Así pues, la situación se tornó algo tensa cuando Peter y Sandes quisieron reemplazarle.

-¡Esta es una nave comercial, no militar!- .Esgrimía Sandes negándose a ceder su teórico privilegio -.
- Estamos en una situación de emergencia y en misión militar bajo jurisdicción de la Confederación- .Rebatió Peter ateniéndose al protocolo de la misma -.Como oficial de mayor graduación me corresponde a mí asumir el mando de la nave.
- Yo no veo por ningún sitio a la Confederación- .Negó irónicamente Sandes que espetó -¡y mis oficiales me seguirán a mí!..
-¡Lo mismo digo yo de los míos! - Añadió Peter visiblemente irritado, aunque tratase de mantener la calma -.
- Propongo que, de momento, evitemos las discusiones entre nosotros- .Terció Kyra intentando apaciguar los ánimos -.Lo primero es comprobar el estado de todos los pasajeros y atender a los heridos .También hemos de saber donde estamos y pedir socorro lo antes posible y para eso no nos beneficia en absoluto mantenernos enfrentados.
- Es razonable - admitió Sandes aflojando un poco en su agresivo tono y añadir con frialdad -.Ustedes encárguense si quieren del pasaje, la nave es cosa nuestra.
- Vamos Kyra- .Le indicó Peter a su compañera adoptando también un tono más sereno, aunque ésta le notaba bastante contrariado y le siguió sin rechistar en tanto él añadía -. Lo primero es comprobar el estado de la gente y ver cuantos de nuestros oficiales tenemos a bordo. Alguno habrá que se quedase para organizar el reembarque como hicimos nosotros .Non quédate aquí con ellos y ayúdales con la reparación.

- Muy bien- dijo el androide a lo que Peter respondió dándole una palmadita amistosa en su cabeza de huevo -.

Su compañera asintió con una tímida sonrisa poniendo una mano sobre su hombro con suavidad. Peter pareció relajarse un poco y suspirar comentando ahora más distendido.

- Quizás no me he mostrado demasiado paciente pero ese tipo me pone nervioso. Debería dejar que nosotros tomemos el control, estamos entrenados para eso.
- Si, pero precisamente por eso tenemos que ser pacientes, no nos conviene un enfrentamiento inútil.- Le respondió conciliatoriamente Kyra -. Debemos trabajar juntos.


Su amigo y superior convino en ello. Debía de reconocer que Kyra sabía contener mejor sus reacciones y dominarlas si venía al caso con mucha más disciplina mental que él. Quizás se debiera a sus dones o simplemente a su carácter. De todos modos, lo más sensato sería imitarla en lo posible, así que ambos se llegaron a los compartimentos internos de la nave .Por todas partes se extendía la desolación, desgraciadamente se habían producido bajas entre las gentes que no contaban con tantas medidas de protección como los ocupantes del puente. Pero nada se podía hacer en ese aspecto, ese carguero no estaba preparado para tantos pasajeros, a decir verdad era una nave comercial y ya anticuada. Había sido un milagro que escapasen de la explosión de aquella supernova y que la mayoría de los que viajaban en aquel cascarón pudieran contarlo. No obstante, no tenían que felicitarse tan pronto. Quedaba mucho que hacer para salir de esa comprometida situación. ¿Dónde estaban?. ¿Podrían pedir ayuda o reparar la nave lo suficiente como para salir de allí?. Para responder a esas cuestiones con una afirmación iban a precisar mucha ayuda y no bastaría la de los tripulantes de ese carguero, en su mayoría sin apenas adiestramiento ni conocimientos para una contingencia así. Peter y Kyra lo sabían bien y contaban con encontrar suficientes efectivos de sus propios compañeros que habían embarcado en esa nave con ellos. Los chicos recorrieron las cubiertas de la nave buscando a más de los suyos. Por fortuna, los miembros de la patrulla de Oumeya estaban todos en perfecto estado, también vieron a unos pocos soldados de Yumlaiance, Nataclia, Ciloner y Akapler .Entre los cuatro planetas no sumaban más de treinta .Los de Oumeya eran en total quince sin contar a Peter y Kyra. Y éste era el miembro de mayor graduación, así pues, ordenó reunión de todos los miembros militares de la nave a los que habló.

-Voy a necesitar la cooperación de todos, que cada representante de los distintos planetas se reúna conmigo.


Por parte de la Cuádruple Alianza se presentó un alférez de Nataclia y un sargento mayor de Yumlaiance .Los miembros de la confederación no pasaban del grado de sargento .El alférez tomó la palabra.

-Es usted el oficial de más alto rango de todos así que estamos a sus órdenes señor. ¿Qué debemos hacer?.- Le preguntó con respetuoso tono en su acento nataclier -.
-Lo primero un recuento de heridos y muertos- .Ordenó Peter muy a su pesar, para añadir con más ánimo -.Atender a los pasajeros supervivientes lo mejor posible. Después haremos un reconocimiento del perímetro y enviaremos señales de socorro .Divídanse en grupos para la tarea en función de sus especialidades.
-Nosotros tenemos dos expertos en comunicaciones, señor- .Intervino el sargento mayor -.
-Bien, ocúpenlos en revisar los equipos de radio y holomensajes, a ver que pueden conseguir.- Le indicó Peter agradablemente sorprendido por lo que era una feliz coincidencia -.
-A la orden- .Repuso el sargento mayor de Yumlaiance saludando al modo de su mundo ,para después dirigirse a los dos soldados en cuestión con voz de mando -.¡Tú y tú, vamos!.

Los demás aguardaron expectantes a recibir instrucciones .En esta ocasión fue Kyra la que indicó.

-Necesito alguien con conocimientos sanitarios para atender a los heridos.
-Nosotros tenemos, teniente- .Declaró una suboficial de Yumlaiance señalándose a sí misma y a tres más de sus compañeros -.
-Y nosotros- .Añadió el alférez indicando a otros dos de sus hombres y mujeres -.
-Kyra encárgate tú de esto, y haz recuento de provisiones, tendremos que racionarlas,- .Le ordenó Peter que acto seguido se dirigió al grupo -. Los restantes organizaremos una guardia de perímetro y un grupo de reconocimiento. Debemos ubicarnos y, de ser posible, encontrar cualquier cosa que sirva como alimento y agua. No creo que tengamos demasiadas provisiones puesto que esta nave en principio solo debía efectuar el rescate y volver a Oumeya.


Todos saludaron en posición de firmes y siguieron a Peter que les sacó al exterior, una vez comprobados los alrededores .En total descendieron de la nave unos doce hombres. Peter, el Sargento de Yumlaiance, con fornido aspecto y gran mostacho, de nombre Talus Ferg , que le sería muy útil al dominar bien el idioma de la confederación y traducir al resto de sus aliados en su idioma común .Iban también cuatro miembros de la patrulla de Oumeya, dos soldados de Yumlaiance, dos de Nataclia, uno de Cilonar y otro de Akaplar .Dejaron a seis de ellos de guardia y los otros iniciaron el reconocimiento .Al poco de caminar entre un paisaje de páramo con escasa vegetación Peter ordenó detenerse.

-¿Cómo lo ve usted sargento?- .Le inquirió al suboficial de Yumlaiance en tono confidencial -.
-Parece un planeta con muchas posibilidades de albergar vida, aunque no sé de que tipo. Quizás no pase de formas simples o seres poco evolucionados.- Valoró Talus -.
-Si, eso creo yo también.- Convino Peter -.Trazaremos un círculo de un kilómetro alrededor de la nave y volveremos a la posición.
-A la orden- .Saludó el sargento que en cuanto hizo el cálculo a sus propias medidas, arengó a los demás para continuar la marcha -.


Se alejaron describiendo la maniobra ordenada por Peter; no obstante en cuanto el último de los hombres se hubo alejado, algo se movió entre los matorrales .Algo que parecía seguirles con la vista....


Una vez consolidada la posición Peter volvió a la nave, Kyra había hecho un buen trabajo con los heridos que se encontraban tendidos sobre camastros improvisados con telas y otros materiales que pudieron conseguir. Satisfecho, el muchacho se dirigió hacia la sala del reactor donde Non-1 tampoco había estado ocioso.

-¿Qué tal Non?. ¿Cómo lo ves?.- Se interesó el chico con un tinte más distendido e incluso familiar -.
-Tendremos mucha suerte si logro activarlo para que funcionen las luces y la calefacción, en este mundo el sol se pone dentro de tres horas y las temperaturas descienden hasta varios grados bajo cero.- Le explicó el atareado androide -.
-¡Haz todo lo humanamente posible para conseguirlo amigo! - .Le pidió encarecidamente el chico -.Tenemos muchos niños y ancianos entre los evacuados.
-Haré todo lo cibernéticamente posible- .Le aseguró el robot con aquella oportuna corrección -.


Peter asintió convencido de ello cuando a su espalda escuchó la voz escéptica de Sandes.

-Esto no arrancaría ni con un milagro, amigo. Se nota que los de la federación no saben de motores.
-Yo confío en Non- .Rebatió calmosamente Peter girándose para sostenerle la mirada -.
-¡Ese montón de chatarra no creo que nos sea de mucha utilidad,! de no haber tocado los motores...
-¡Estaríamos muertos! - .Espetó Peter descerrajando aquel comentario -.¡Así que cállese ya!.
-¿Por qué no me obliga?- .Le replicó Sandes con tono abiertamente desafiante -.


Peter tensó sus músculos en tanto su oponente elevaba los puños. Por suerte, un soldado de Akaplar entró en ese momento.

-Señor- .Terció más que oportunamente dirigiéndose a Peter -.Le llaman del puesto de guardia, han visto algo extraño a unos cientos de metros.
-Ya solucionaremos esto después - .Aseguró Peter mirando a Sandes de modo más que severo -.
-Cuando quieras soldadito - .Sonrió este con malicia y un descarado desdén -.


Sin prestarle más atención, Peter corrió siguiendo al soldado hacia la zona de guardia .Allí, el sargento mayor Talus, que se había quedado al mando cuando volvieron, le informó.

-Señor. Algo extraño se ha movido tras de esa zona- .Declaró apuntando con uno de sus dedos hacia el este y ofreciéndole unos binoculares a Peter con su otra mano -.


En cuanto se orientó a la posición adecuada Peter miró con atención, aunque sólo se veía a los matorrales agitarse. Estarían a unos seiscientos metros y la altura de los ramajes podría ser de un par de metros.

-No sopla brisa, al menos aquí- .Dijo Peter con talante reflexivo- .Esos movimientos deben de estar provocados por algo, pero ¿el qué?.- Preguntó en modo retórico -.
-No tengo ni idea señor- .Admitió el sargento mayor encogiéndose de hombros, aunque no fuera una cuestión dirigida a él -.
-Preguntaré si hay trajes térmicos, sería conveniente no dejar la guardia.- Comentó Peter -.Si es posible haremos turnos de seis hombres cada tres horas, de lo contrario apostaremos centinelas con visores nocturnos cerca de las puertas, cerradas y aisladas .La temperatura bajará bastante .Permanezcan atentos e infórmenme si sucede algo fuera de lo normal.
-A la orden -. Repuso el suboficial cogiendo de nuevo los binoculares para dar otro vistazo -.


Peter volvió dentro con algunas dudas. ¿Qué podría ser aquello?. ¿Tendrían los motores listos para dar calor a la nave o correrían el riesgo de congelarse con la cruda noche?. Se acercó con estas preguntas en la cabeza hacia el puesto de radio y navegación donde recibió el informe de los técnicos.

-Señor- .Le explicó uno de ellos con moderado entusiasmo -.Hemos logrado activar un comunicador algo rudimentario, en cuanto podamos instalar una antena de emisión seremos capaces de radiar un S.O.S.
-¡Magnifico, les felicito, han hecho un excelente trabajo !- Exclamó Peter más animado y sobre todo tratando de elevar la moral -.


Cosa que consiguió .Los dos técnicos más próximos a él sonrieron dándole las gracias el muchacho volvió entonces hacia la posición de Kyra deseando que pudieran emitir y sobre todo recibir respuesta y ser rescatados muy pronto.