UNC 31

4/Capitulo 31.Unos antiquísimos recuerdos.


Bajando lentamente, atravesando aquellas aguas cada vez más densas, el grupo ganaba profundidad al tiempo que iba perdiendo la luz del incipiente sol .En aquel mundo interior los cuatro flotaban libres de peso. Enil pasó a encabezar la marcha guiándoles en una dirección determinada. Bajando en oblicuo respecto del casco de su lancha que, muy pronto, dejó de ser visible .La iluminación de los trajes se encendió dotando a aquel lugar de luz. Alrededor de los muchachos decenas de peces curiosos iban y venían en caprichosas formaciones que se hacían y deshacían con vertiginosa rapidez. Todos contemplaban maravillados aquel despliegue de la naturaleza que parecía invitarles a adentrarse aun más en sus secretos .Enil les indicó que debían seguir bajando deprisa. Ahora no había tiempo de entretenerse con aquel espectáculo por bello que fuera.


- Siento algo especial, una sensación de paz me rodea por todas partes -. Les comunicó Kyra a los demás por los interfonos -.


El descenso siguió hasta alcanzar los treinta metros, treinta y cinco, cuarenta metros y un cuarto de hora de bajada .A los cincuenta metros comenzaban a marcarse los contornos de una planicie pelada con piedras erosionadas. Restos quizás de algún antiguo templete sumergido hace miles de años. Enil se posó en el centro y los demás le imitaron.


- Estas son las ruinas de un antiguo palacete - .Les contó vía transmisores que todos llevaban en la oreja - .Forma parte de las ruinas de una civilización perdida hace más de diez mil años.
-¡La Atlántida! - repuso Kyra con admiración -. He leído cosas sobre ella. Y puedo sentirlas ahora, me son muy familiares .En este lugar hubo una vez un puesto avanzado .La gente vivió aquí .Y murió aquí cuando sobrevino el gran cataclismo.
- Tú también lo has notado - .Comentó Enil sin parecer muy sorprendido para declarar - .Esta fue la cuna de la civilización humana.
-¡Vaya, es impresionante! - .Intervino Gordon -.


Peter convino en ello aunque su atención se centró más en una especie de forma que vio moverse furtivamente entre unas peñas algo alejadas. Con la densidad del agua y la precaria iluminación no podía asegurarlo, no obstante, parecía tener silueta humanoide .Sintiéndose algo tonto, decidió no comentar nada a los demás. De nuevo volvió a verlo, ahora con más claridad. El resto del grupo centraba su atención en las ruinas y no parecía percatarse de nada. Kyra, por su parte, se acercó a una columna llena de algas y limpió un poco una parte de su superficie.


- Hay una inscripción aquí .Está en un idioma desconocido y no puedo entenderla.
- Hasta que volvamos a vernos- repuso melancólicamente Enil que les contó - .La escribió un joven atlante antes de escapar.
-¿Y cómo puedes saber eso?.- Inquirió Gordon con incredulidad -.
- Por que ese joven atlante fui yo mismo- respondió su interlocutor dejándole pasmado- .


Kyra, atónita también, parecía tratar de pensar .Ahora y vagamente algún recuerdo afloraba a su mente. Peter en tanto, se había alejado un poco confiado en que, al estar sobre esa superficie, no podía perderse. Además, tenía el intercomunicador .A la mínima dificultad contactaría. De modo que siguió aquel recorrido. La planicie iba derivando en una explanada descendente y su medidor de profundidad marcaba 60 metros, 65 y él seguía como atraído irremisiblemente por aquella figura que ahora veía danzarina a tan sólo unos cinco metros de él.

-<<¿Quién eres?>>.- Se preguntaba el muchacho -


Esa silueta se le acercó .No podía distinguirle ningún rasgo, era como si de una sombra se tratase. Le tomó de una mano y su contacto era suave y frío. Peter la cogió confiado y sintiéndose maravillosamente bien. Sin apenas darse cuenta, se vio rodeado por más de aquellos seres que le conducían hacia abajo .Cada vez más y más profundo...


-¿Cómo dices?- .Exclamó Gordon dejando casi sordos a sus amigos- .
- Si, yo fui un atlante- le confirmó Enil -.Sé que pensarás que estoy loco pero lo descubrí cuando encontré este lugar. Más bien fue como si ya supiera donde estaba y tuviese que volver.
- Lo sé, es algo que a veces me ocurre a mí- convino Kyra- .Sensaciones y recuerdos vagos de sitios ya olvidados .Como ahora. Sé que de algún modo estuve aquí, pero no recuerdo como ni cuando, ni porqué. Quizás en otra vida.


El chico asintió de modo cómplice, el único que no estaba conectado a sus compañeros por el sentimiento de pertenencia y fusión con aquel entorno era Gordon. Y fue él quién terció para tratar de sacarles a ambos de ese ensimismamiento.

- Vaya, ¡cómo estáis los dos!. Quizás os esté afectando la borrachera esa. ¿No crees Peter?.- Inquirió buscando el apoyo de su amigo para no obtener respuesta .Cuando salió de la extrañeza comenzó a inquietarse e insistió. -. Peter, ¿dónde estas?.
- No está aquí- reparó Enil al otear a su alrededor espetando contrariado y preocupado al tiempo - .¡Ese estúpido se ha separado del grupo! .
- Puede haberle ocurrido algo- conjeturó Kyra sintiéndose alarmada ante un peligro más que posible cerniéndose sobre su amigo - .¡Está cerca de eso estoy segura! .
-¡Vamos a buscarle! - .Les indicó Enil a sus compañeros - .Podría estar en serios problemas. Llevamos ya media hora bajo el agua.


Los tres nadaron en busca del desaparecido. El protagonista de la preocupación, completamente ajeno a inquietud alguna, seguía bajando rodeado por aquellos extraños seres que no se comunicaban con él. Peter les preguntaba pero era inútil, no podían escucharle o quizás no deseaban contestar.

-¿Quienes sois vosotros?. ¿Qué queréis de mí? .¿A dónde me lleváis?.


Seguía descendiendo, estaba ya en casi los doscientos metros y llevaba cuarenta minutos sumergido en el agua. Caía sin freno por una especie de gran fosa de la que no se veía el fin, pero él no se preocupaba. Más allá de toda precaución y sentido común, por una razón desconocida, se sentía seguro y feliz en manos de aquellas criaturas.


- Tiene que haber bajado por aquí - .Afirmó Enil señalando el final de la plataforma submarina- .No tenemos elección, caída libre. Sólo nos quedan veinte minutos .Aunque será mejor que me ocupe yo. Vosotros debéis subir haciendo las paradas como os he dicho.
-¡De eso nada! - .Se negó enérgicamente Gordon - .Peter es mi amigo y no le voy a dejar aquí sólo.
- Preocúpate por tu propia seguridad- le aconsejó Enil - .Yo no puedo estar al tanto de todos.
- Tú has dicho que no es bueno bucear solo- le argumentó Kyra con irrefutable solidez- .¿Y si te pasa algo a ti también?.
- Eso es colega, así que te pongas como te pongas, iremos tras de ti. Y cuanto más tiempo perdamos discutiendo sobre ello menos tiempo nos queda.- Remachó Gordon sin dejarle salida de replicar -.
- Está bien - concedió su interlocutor resignado ante esos argumentos que él mismo les había proporcionado .¡Vamos allá!, pero que conste que os lo advertí.


Lo malo era que, por más que trataban de contactar con él era imposible hacerlo, incluso Kyra tenía dificultades con su telepatía. Debía esforzarse mucho y por ahora no obtenía comunicación con su perdido compañero. La situación no admitía demoras y tanto ella como Gordon se dieron por avisados de los riesgos y reanudaron la bajada. En ese momento, Peter había llegado al límite. Estaba en los trescientos metros de profundidad y tan sólo le quedaban quince minutos. Tomó tierra junto con sus extraños guías en otra superficie plana sobre la que se elevaban columnas en mejor estado que las anteriores .Alrededor de ellas, las figuras comenzaron a danzar en corro llevando a Peter de las manos.


-¡Esto es estupendo! - .Exclamaba él dentro de su mascarilla - .¡Quiero sentirlo más de cerca!.


Estaba tentado de quitarse la mascarilla y respirar a pleno pulmón aquella felicidad que le embriagaba. Enil y los demás seguían recuperando terreno y ya veían aquella superficie poblada por columnas .Vieron a Peter allí sólo danzando y Kyra pudo por fin, transmitirle un mensaje telepático.


- .


Eso pareció servirle al chico como alarma .De pronto se dio cuenta de su verdadera situación. Estaba sólo y su tiempo y reservas se agotaban.

-¿Cómo he llegado aquí?-. Preguntó vía intercomunicador, que ahora volvía a funcionar, en tanto la visión se le nublaba - .No veo bien- pudo añadir con la voz más débil -.
- Tranquilo, te sacaremos, aguanta - le respondió Enil sin asomo de vacilación -.


Peter perdió el conocimiento en el mismo instante que sus compañeros le cogían y comenzaban a ascender .Quedaban diez minutos, ¡no llegarían a tiempo!, tenían que efectuar demasiadas paradas. Por fortuna, Enil no les había dicho la verdad respecto a su autonomía. Tardaron más de media hora en poder subir a la superficie con Peter aun inconsciente, pero cuando le despojaron de su mascarilla, ya izado en la lancha, descubrieron con alivio que respiraba todavía.


- Creía que nos dijiste que sólo disponíamos de una hora antes de subir- .Terció Gordon ahora aliviado de que no hubiera sido así -.
- Siempre digo eso a quien viene conmigo y es novato. Así no se arriesga a rozar el límite auténtico. Es mejor. ¿No lo crees?.
- En este caso no tengo más remedio que darte la razón- convino su interlocutor alabando la experiencia de ese muchacho, que les había salvado de una muerte cierta -.
- Sea como sea, lo principal es que Peter está a salvo .¿Qué ha podido ocurrirle?.- Preguntó Enil a nadie en particular -.
- La borrachera- declaró inmediatamente Gordon dándose por aludido -.
- Si, seguramente sea eso, ya veremos lo que nos cuenta él cuando despierte- dijo el propio Enil que no daba la impresión de conformarse con esa razón, aunque se le notaba deseoso de zanjar el asunto, al menos hasta que regresaran y así lo corroboró cuando les indicó.- .Ahora debemos volver a casa.


Puso rumbo a la costa y llegaron a la playa al cabo de una hora y cuarto. Entre él y Gordon, transportaron a su amigo que parecía estar sólo dormido. Respiraba lentamente pero se hallaba fuera de peligro. Así, su compañero despertó en la cama en su cuarto de la pensión. Abrió los ojos encontrándose con las miradas de los demás y musitando todavía bastante aturdido, embotado y con un agudo dolor de cabeza.


-¿Dónde estoy?.
- Aquí, en la pensión de la señora Hudson - .Le contestó Gordon con una sonrisa de alivio en el semblante y un tono jovial cuando añadió -.¡ Imprudente ! , que susto nos has dado.
- Menos mal- suspiró Kyra al verle reanimarse- .Nos tenías preocupados.
- Os dije que no os separases del grupo- le recriminó suavemente Enil que, no obstante, le observaba con curiosidad cuando le preguntó -.¿Qué fue lo que te impulsó a alejarte?.
- Lo siento- .Pudo responder al fin su interlocutor que se sentía cada vez menos aturdido y más avergonzado, con el dolor de cabeza martilleándole las sienes, de todos modos recordó aun confuso -.Fue muy extraño. Aquella criatura me llamó y no pude resistirme. Sentía una estupenda impresión de bienestar.


Gordon y Kyra se miraron sorprendidos, este incluso declaró convencido.

- Lo que yo pensaba, has sido víctima de la borrachera de la profundidad.


Aunque para su asombro y el de los demás, Enil inquirió cada vez más interesado.

-¿Qué clase de criatura?.
- No lo recuerdo bien, parecía una mancha oscura con forma humana pero no era visible con claridad- .Le describió Peter aun visiblemente desconcertado -.
- Todavía estás atontado- comentó Gordon pero Enil le hizo un gesto para que se callase e intervino -.
- Podrían ser ellos. Los antiguos habitantes del mundo sumergido.
-¿Los antiguos?.- Inquirió Peter sin comprender - .
- Si, quizás deba explicároslo todo para que podáis entenderlo bien.
- Sería lo mejor- opinó Kyra a quién esas palabras no la dejaban indiferente, sobre todo cuando confesó -.Ahora que parece que yo también comienzo a recordar.
- Tú eres telépata y posees un gran don de clarividencia - . Le dijo Enil- .Eso no es por casualidad. Yo también me quedé sorprendido cuando llegaste, sentí al instante tu gran energía espiritual, era tan parecida a la mía que no tuve dudas.


Todos escuchaban sin comprender hasta que Gordon le recordó al chico.

-¿Esto tiene algo que ver con esa historia que nos contaste debajo de que eras un descendiente de los atlantes?.


Ante la cara sorprendida de Peter, Enil asintió, aunque matizando.


- Más concretamente yo mismo fui un Atlante .Veréis, hace muchos miles de años existió un enorme continente que ocupaba lo que hoy son estas islas y una gran parte del océano Atlántico .Era un lugar como otro cualquiera, hasta que una antigua y sabia civilización llegada de las estrellas tomó posesión de él .En aquella época, tan sólo los antepasados del hombre actual moraban en ella y estos seres superiores quisieron ayudarle a evolucionar a su imagen y semejanza. Lo hicieron e incluso muchos de estos avanzados se quedaron a vivir aquí, mezclando su sangre con la de estos y creando un pueblo nuevo que llegó a ser el primer reino Terrestre. El Reino de Atlántis. Sucedió entonces que otros seres superiores llegaron nuevamente del Cosmos .Eran compañeros de los que se instalasen aquí por vez primera. Aunque estos no tenían intención de unirse a los humanos híbridos que existían ahora y menos a los otros humanos, simplemente evolucionados a partir del simio que sus compatriotas ayudaron a crear .Uno de sus jefes, de nombre Zeus. ..

-¿Zeus?- Interrumpió Peter sorprendido- .¿Cómo el dios mitológico terrestre de la edad de oro Griega?.
- Si, era ese mismo Zeus.- Confirmó Enil que prosiguió - .Él tuvo problemas con otro de los jefes de su mundo, Cronos, a quien la mitología retrató como su padre .Lo que realmente ocurrió es que hubo una guerra civil entre ambos y Zeus huyó a la Tierra con los suyos. Allí conoció a un joven príncipe de los Atlantes llamado Alectis, del que se hizo muy buen amigo. Este le ayudó en su lucha contra Cronos, ocultándole de este hasta que Zeus estuvo en condiciones de contraatacar y vencer para proclamarse jefe de sus compatriotas. Dada su gran tecnología y sus excepcionales capacidades, esos seres pasaron a ser venerados como dioses por los primitivos griegos y otros pueblos que tuvieron contacto con ellos e incluidos en las leyendas que con el tiempo se fueron deformando.


-¿Y qué ocurrió después?.- Quiso saber Kyra que sentía como su mente se iba aclarando a cada palabra que escuchaba -.
- Todo se estropeó por culpa de la Príncipe de la Tierra, un poderoso ser que regía los destinos del mundo y que, temeroso de la fuerza que podrían alcanzar Zeus y los atlantes unidos conspiró contra ellos. Logró engañar al dios griego, haciéndole creer que el príncipe de la Atlantida deseaba robarle su puesto. Entonces el considerado rey de los dioses, junto a su hermano Poseidón y ese príncipe que residía entonces en la Tierra, lanzaron un poderoso ataque contra la Atlántida sumergiendo toda la isla- continente en el mar. Muy pocos atlantes escaparon, entre ellos el príncipe Alectis, su hermano y la madre de ambos. Aunque el príncipe les creyó muertos tras el cataclismo, estos sobrevivieron durante años.
- Lo recuerdo- .Asintió Kyra que aclaró para asombro de sus amigos- .Mis recuerdos de otra vida son ahora claros para mí. Y cuando los dioses atacaron la Atlántida tuve el tiempo justo de escapar de allí. De huir con mi hijo que tan sólo era un muchacho mientras todo se desmoronaba a nuestro alrededor. Pero las secuelas de aquello acortaron nuestras vidas y ya nunca pudimos volvernos a reunir con Alectis.
- Si, y ese muchacho que iba contigo era yo mismo. Tú fuiste mi madre en aquella encarnación- .Reveló Enil dejándoles pasmados a todos, sobre todo al aseverar -.Que te llames Kyra, no es casualidad.
- Me lo puso una mujer muy querida para mí- .Le explicó ella- .Mi verdadero nombre es Meredith.
- Puede que en esta vida lo sea .Pero en realidad, tu verdadero nombre es Kyra. Reina de Atlantis, esposa de Atlas, el padre de Alectis y mío. Pues yo era Erectris. El heredero del trono.
-¿Y que ocurrió después?.- Quiso saber Gordon aun sin podérselo creer -.
- Sucedió que Alectis llegó a convertirse en un dios. Según el mito, al beber la Ambrosía que estos poseían. Otras versiones más científicas lo explican con la hipótesis de que reconvirtió su cuerpo genéticamente volviendo a su naturaleza extraterrestre. Aunque no lo sé con seguridad. Después vagó durante años, muchos años humanos por la Tierra hasta que logró una extraña gema que le posibilitaba el viajar por el tiempo y el espacio dimensional. Creo que trabó contacto con algunos de sus descendientes y que lucharon juntos contra el malvado príncipe de la Tierra. Después de lograr la victoria se marchó dejando en la Tierra a algunos de sus vástagos como nuevos príncipes y todavía viaja recorriendo el espacio. Quien sabe. Puede que un día regrese.- Sonrió Enil -.
-¿Y qué pasó contigo y con Kyra?.- Le preguntó Peter -.
- Ella y yo nos establecimos en Grecia y para huir de la venganza de Zeus vivimos como personas normales. Yo me casé con una mortal y tuve mis descendientes pero nuestras largas vidas habían sufrido un serio daño al perder nuestra patria y ser privadas de mucha de su energía. Sólo sobrevivimos unos pocos años. Al morir, mi alma no debió de quedar satisfecha con el trauma de la destrucción de mi mundo .Pues, en nuestra huida, resulté herido por una explosión de la causadas por Zeus- se tocó el hombro explicando- .Me alcanzó en este hombro y desde entonces cada vez que me acerco al mar del que escapé me duele. Es un buen recordatorio de la humillación y el dolor de perder mi patria bajo las aguas.
-¿Y todos estos recuerdos, los llevabas dentro de ti?.- Quiso saber Peter asombrado -.
- Los llevaba dentro y también tuve ayuda para sacarlos a la luz -.Sonrió el chico -.
-¿A qué te refieres?.- Le inquirió Gordon, visiblemente atónito e interesado a su vez -.
- Eso es algo que no puedo contar .Al menos todavía- repuso su contertulio con un tinte misterioso. Pero Kyra le había entendido sin palabras, le miró y asintió despacio con la cabeza sin que sus dos amigos se dieran cuenta - .
- Vaya, ¡que historia! - .Repuso Peter con aire reflexivo retomando el tema de sus alucinaciones. (o al menos eso quería pensar que fueron) - .¿Entonces, quienes eran esas extrañas criaturas que vi?. ¿Efecto del oxígeno y la presión?.
- No, seguramente era los habitantes del mar.- Les desveló Enil- .Cuando la Atlántida se hundió algunos de sus pobladores quedaron retenidos allí en espíritu, negándose a abandonar su morada en vida. Allí permanecen como guardianes de su mundo, esperando el día de regresar a la Tierra y de allí volver a su planeta de origen en el Espacio.
-¿Quieres decir que esos seres podrían estar en otro mundo de este universo todavía?.- Inquirió Gordon que apenas daba crédito a lo que oía -.
- ¿Por qué no?- respondió Peter- .Y si hace ya tantos miles de años eran tan avanzados como para venir a la Tierra y colonizarla ,ahora incluso podrían haber evolucionado más.
-¿Cómo podrán ser?.- Intervino Kyra con patente curiosidad, que justificó al agregar -.En cierto modo soy una de sus descendientes.
- Puede que quizás algún día volvamos a verles.- Sonrió Enil con un gesto de esperanza -.Y quien sabe si un día las almas de sus descendientes puedan regresar a su mundo en una nave que refulja como la plata .Al menos a veces he soñado con esa visión. La de una flecha de plata que surca los cielos saliendo de las profundas aguas del mar.
- Bueno - .Suspiró Gordon, que, fiel a su costumbre, cortó de raíz aquella conversación que cada vez estaba adquiriendo un mayor tiente transcendental declarando su consabido- .Me muero de hambre chicos.

Todos sonrieron en parte aliviados al derivar hacia un tema más mundano, Peter incluso se incorporó lentamente ante la atenta mirada de sus amigos.

-¿Estás bien?,- le inquirió Kyra -.
- Si, perfectamente- aseguró con desenfado puesto que su dolor de cabeza iba remitiendo al fin - .Y por esta vez estoy por completo de acuerdo con Gordon .Yo también tengo el estómago vacío.¡ Podría oírse el eco dentro!.


Aquel comentario desató las risas de todos y estas fundieron la solemne gravedad que flotaba aun en el ambiente .Así que Peter y Gordon se levantaron juntos y se dirigieron hacia el comedor, quizás la señora Hudson les diese ahora algo de comer, aunque faltasen todavía treinta minutos para la cena. Por lo menos tenían la excusa de su accidentado retorno y decidieron intentarlo. Kyra y Enil se quedaron solos en la habitación y él le propuso señalando a la puerta que daba acceso al porche trasero de la casa.

-¿Te apetece pasear?.


La muchacha aceptó, sabía que él iba a revelarle algo que no quiso decir en presencia de los chicos. Salieron los dos y tras unos pasos hacia la playa y el sol poniente él efectivamente le comentó.

- Tú has sentido lo que pensaba ¿verdad?.
- Si, porque tú me lo has permitido .También posees dones como los míos. Es algo que sólo he percibido en otra persona que conozco .Podéis abrir o cerrar vuestra mente. Aunque lo suyo es una destreza adquirida.- Matizó -.
- Lo nuestro es natural .Esos seres de los que remotamente descendemos tenían esa capacidad, entre otras muchas.
-¿Es cierto?.- Le preguntó Kyra -. ¿Realmente volverán esos seres para ayudarnos?. ¿Pero contra qué?.
- Es algo de lo que estoy convencido- afirmó resueltamente Enil que sin embargo añadió- .No me preguntes contra qué o contra quién pero el Universo que conocemos probablemente se enfrentará a una gran crisis. Yo lo sé, porque, al igual que mi origen me fue revelado…
- Te fue revelado por alguien muy cercano a ti- adivinó Kyra antes de que él concluyera -.
- Si, tanto como lo fue mi propio hermano Alectis.- Confirmó el muchacho- .A todos os he contado que pudo viajar a través del espacio, el tiempo y las dimensiones al convertirse en dios y recuperar de manos de estos, una gema que permitía tales cosas. En realidad, una muestra más de la avanzada tecnología de sus antecesores. Lo que no les he dicho a tus amigos y tú con buen criterio has decidido silenciar es que él, siendo yo un muchacho, se me apareció contándome mi origen y también me habló de las luchas que mantuvo contra el oscuro poder y los siervos del mismo, que trataron de apoderarse de este planeta. Mi hermano fue ayudado por otros dioses que quedaron como vigilantes aquí, pero ellos no podían hacer nada ya en el futuro. Alectis me advirtió que, un día, no solamente la Tierra, sino el Cosmos estaría amenazado por algo tan poderoso que exigiría la unión de todos los mundos. De todas las civilizaciones. Él, junto con otros seres superiores que viajan por el Universo lo sabían, pero no podrían impedirlo por sí mismos .Necesitarían también de nuestra colaboración. De que forma deberemos ayudarles y cuando es algo que desconozco .Sólo me contó que en otros mundos y civilizaciones se habían dado avisos y profecías similares por cuenta de los dioses de aquellos planetas. Habrá personas que sean, digamos elegidas, para encabezar la lucha contra lo que nos amenace.

- Puede que nosotros seamos parte de ellas- .Conjeturó Kyra -.
- No estoy seguro- repuso Enil- .Por ello aun debo aprender más, tratar de sonsacar toda la información posible y desvelar los misterios de mi pasado. Recuerdo que cuando Alectis vino y me contó todo esto, le pedí que me llevase consigo hasta allí para conocer toda la historia por mí mismo. Pero él negó con la cabeza sonriendo y me dijo que sólo debía de ocuparme del futuro, que el pasado pertenecía solamente a los recuerdos y a los dioses. Tú fuiste mi madre, por ello, en el instante que te vi supe que debía contártelo .Nuestras presencias aquí y ahora no son casualidad. Es como si hubiera sonado la señal de alarma, ¡hay que comenzar a preparar la defensa!. Aunque todavía no sepamos como ni para cuando exactamente .Por ello no he querido decírselo a tus amigos .Ellos no podrían entenderlo como tú y se alarmarían sin necesidad o en el mejor de los casos, ni siquiera me creerían.
- Lo sé- musitó solidariamente Kyra -.Todos tenemos una vida que vivir y sería inútil hipotecarla desde ahora en base a una especie de Apocalipsis aun sin confirmar.


Enil asintió y mirando a los restos del sol poniente declaró dando por terminada aquella conversación.

- Volvamos, supongo que la señora Hudson estará preparando ya la cena.


Los dos muchachos regresaron ahora en silencio, cada uno centrado en sus propios pensamientos .Aunque estos se viesen cómicamente interrumpidos por la conversación que provenía desde el comedor.


- Solo un poquito- escucharon suplicar a Gordon -.
- Vamos señora Hudson, ¡que tenemos hambre! - .Añadió Peter con el mismo tono -
-¡He dicho que ni hablar! - .Se opuso aquella venerable y aparentemente dulce anciana, aunque desde luego más firme y severa que todo el estado mayor de Oumeya junto - .
- Es que estamos agotados. Necesitamos reponer fuerzas –.Trató de justificar Peter -.
-¡La cena es a las siete y a las siete se servirá!. Ya está haciéndose, así que tened un poco de paciencia .Luego podréis hartaros.- Sentenció la anciana sin ceder ni un ápice -.
- Es que tengo un agujero en el estómago- .Insistió Gordon -.
- Y yo casi desfallezco- convino Peter echándole bastante más cuento del necesario- ..
-¡Como sois los jóvenes de hoy! - .Les recriminó la casera- .Siempre quejándose. Seguro que vuestros padres os consienten todo. Pero ya sois mayorcitos y yo no soy vuestra mamá. Así que os aguantaréis hasta dentro de treinta minutos. No creo que os vayáis a morir de hambre por eso.


Peter y Gordon asintieron poco convencidos de eso, pues el sonido de sus estómagos argumentaba lo contrario .Kyra y Enil entraron en ese momento riéndose de aquella situación.

-¡Animaros chicos! – .Les arengó burlónamente ella más aun cuando añadió - .¡De cosas peores habéis salido!.
- Si, no hay mal que cien años dure- .Afirmó Enil divertido -.


Entre estas y otras bromas a costa de los hambrientos muchachos, se desgranaron los minutos que a ambos les parecieron eternos. La cena se sirvió, cenaron con avidez y después pasaron el rato con juegos de mesa. Aquella fue una velada muy distendida. A todos les vino muy bien relajarse de aquella intensa jornada. Cuando ya estaban agotados se fueron a dormir. Al día siguiente tendrían, ¡como no! que levantarse pronto pues, aparte de las normas de la señora Hudson, querían visitar otros lugares de la Tierra. Enil les comentó que él debía ir a otro sitio y que partiría temprano, así pues se despidió de ellos y especialmente de Kyra, a la que telepáticamente aseguró que volverían a verse un día no muy lejano.