UNC 68

14/.Capitulo 68.Nuevas relaciones familiares.


Gina se entretenía mirando al cielo con expresión soñadora y algo resignada. Sabía que más allá de él, su esposo estaba de viaje para llevar a cabo una importantísima tarea diplomática. Ese parecería ser el sino de Yener .Fue embajador en Oumeya y ahora tendría que parlamentar con esos peligrosos interlocutores. Aunque ella tenía fe en que todo iría bien. Dedicó ahora la mirada hacia su hija, la pequeña Samra dormía plácidamente en su parque. Aunque este ya le iba quedando pequeño. Bueno, pronto tendría que cambiarla a una habitación propia, ya tenía un año y sería buena idea que comenzara a acostumbrarse a estar un poco apartada de sus padres. Aunque por desgracia, con Yener eso estaba más que conseguido. Gina recordaba los mensajes que la propia Aluria le había mandado, la madre de su esposo deseaba mucho ver a su hijo y a su nieta, pero sólo podían hablar ocasionalmente por videoconferencia .Cierto era que tanto ella, como su esposo Nevis, que había hecho las paces por fin con Yener por enésima vez, habían ido a visitar a su nieta en varias ocasiones. Lo mismo, aunque con menos frecuencia había hecho Erel. Pero pocas veces se habían encontrado con el marido de Gina. Ésta se levantó para hacerle a su hija la papilla, la niña se despertaría pronto y tendría hambre .Iba directa a la cocina cuando llamaron a la puerta .Por el videófono, Gina pudo ver a una joven muchacha de pelo entre rubio y castaño claro, de unos bonitos ojos azules, creía recordarla de algo, aunque no estaba segura. La chica entonces preguntó con algo de timidez.


-¿Hay alguien en casa?.
-¿Quién es?- le inquirió Gina -.
-¡Ah perdone!, ¡qué tonta!. Ni siquiera me he presentado, quizás no me reconozcan después de tanto tiempo, me llamo Calina Delaier, soy la hermana pequeña de Menra .Pasaba para saludarles.- Explicó azorada -.


Gina acogió esa respuesta con agrado, la muchacha parecía bastante simpática y siendo la hermana menor de la comandante Delaier...

- Pasa - le pidió su interlocutora abriendo la puerta -.


La muchacha entró esbozando una encantadora sonrisa para añadir con prevención.

- Buenos días, espero no importunar.
- No ¡claro que no! - .Afirmó Gina devolviéndole la misma expresión -.


La esposa de Yener se percató de que aquella chica vestía una túnica de color azul cielo. Era distintiva de algo, pero tampoco se acordaba ¡esas dichosas organizaciones de Yumlaiance! .Por fortuna, Calina le explicó de inmediato quien era ella con más detenimiento y el motivo de su visita.


- Verá, soy maga elemental de Esil, me han destinado cerca de aquí. Estoy en la sede que tenemos en esta provincia y quería agradecerle a su esposo el haberme ayudado a petición de mi hermana.
-¡Ah, ya! - recordó entonces Gina -.Si, Yener me lo comentó hace tiempo, pero es que con tantos líos y ocupaciones ni me acordaba, perdona. Así que te han enviado aquí.
- Si, me alojo en la sede de mi Hermandad- le contó ella -.Mi hermana me pidió que, cuando llegase aquí, les diera recuerdos, aunque ella ha sido destinada para acompañar a su marido en la legación que nuestro emperador y el gobierno envían a Nephraler.
- Si, ya estoy enterada de eso- .Suspiró Gina sabiendo de sobra lo difícil que era un evento de esa magnitud - .¡Ojala que todo salga bien!.
- Seguro que sí ¡son los mejores! - aseveró Calina con visible entusiasmo confesando también- .¿Sabe?... yo admiro mucho a su esposo. El general Rant ha hecho mucho por Yumlaiance.
- Si, aunque me gustaría que pasase más tiempo en casa- se lamentó Gina sonriendo con apagada ironía -.
- Bueno- .Sonrió la muchacha a su vez, restándole importancia - .Eso dice mi madre de mi hermana y de mí. ¡Nos pasamos la vida fuera! .Aunque ya se sabe, son gajes del oficio.
-¡Qué me vas a contar! - rió más sinceramente Gina apuntando con gracia y no sin humor sarcástico -.¡Mi familia entera está dedicada al bienestar de la galaxia!.



Antes de que su interlocutora pudiera responder se escucharon los grititos de la niña. Samra había despertado y reclamaba su comida. Su madre exclamó entonces mirando hacia el parque donde estaba la pequeña que había comenzado a llorar.


-¡Se me había olvidado!, debo hacer la papilla para mi hija. ¿Podrías ayudarme?- le pidió apuradamente a Calina -.
- Claro, ¿qué debo hacer?- le inquirió esta demostrando mucho interés -.
- Intenta distraer a mi hija, la pobre tiene hambre y siempre que le pasa eso llora mucho.
- Será un placer.- Afirmó Calina dirigiéndose hacia el parque en tanto decía con tono meloso -.Hola chiquitina. ¿Te vienes conmigo?.


La niña dejó de llorar mirándola con los ojos muy abiertos, realmente desconcertada por aquella persona extraña para ella .Calina le sonrió elevándola en brazos .Aunque pasado el primer instante de sorpresa, Samra, inquieta por aquella desconocida ,comenzó nuevamente a llorar con ganas.

- No llores - le pidió dulcemente la muchacha reclamando su atención con un gesto de sus manos - .Mira esto.


Dejándola sentada en el sofá se puso delante de ella e hizo aparecer unas mariposas. Era una ilusión muy simple pero bastó para captar la atención de la pequeña que observaba atónita como esas bonitas mariposas revoloteaban a su alrededor.


Gina trajo la papilla y la dejó sobre la mesa mirando sorprendida aquellas bonitas ilusiones que la chica había creado para su hija. Samra estiraba sus pequeños brazos y esbozaba la mueca de una sonrisa, tratando de coger alguna de aquellas figuritas danzarinas que ahora variaban, agregando caballitos de mar o estrellitas.


-¡Qué bonito! - declaró Gina -.
-¿Le gusta?.- Sonrió Calina agregando con despreocupación - .Es un truco muy fácil. Nos lo enseñan casi cuando acabamos de ingresar.
- Pues es algo precioso, a la niña le encanta- .Aseguró Gina que ahora dirigiéndose a su hija, añadió -.Ya está la comida cielo.-

Y cogiendo a su hija en brazos la transportó hasta su sillita especial.


La niña ahora lloraba por el motivo contrario. Deseaba seguir viendo aquellas cosas tan bonitas, por suerte Calina le hizo aparecer más según Gina le daba las cucharadas de papilla. Una vez terminada la comida, Samra sonrió contenta. Seguía tratando de coger esas figuritas...


- Es una ricura de niña- .Afirmó Calina observándola con expresión tierna.-
- La adoramos, es natural, por algo es nuestra pequeñina - convino Gina -.Si vieras a mi marido jugando con ella. El pobre Yener siempre se lamenta de que debe estar más tiempo fuera de casa que con su hija y conmigo.
- Cuando terminen estas conversaciones seguro que tendrán mucho tiempo para pasarlo juntos - la animó aquella muchacha -.


Gina asintió, esa chica le caía muy bien, era físicamente muy parecida a Menra pero sus personalidades no se asemejaban en casi nada .Y no es que la comandante Delaier fuera mala persona ni le cayese mal, al contrario. Pero Calina tenía algo, quizás una pureza innata en ella y una enorme simpatía y bondad .Era una persona idónea para ser maga, creaba belleza por donde quiera que pasara y su gran inocencia, parecida a la de una niña, de seguro que era también ingrediente fundamental para crear aquellas ilusiones .Lo cierto es que había conectado muy bien con la pequeña Samra que jugueteaba ahora con las manos de la muchacha.


- Les has caído muy bien a mi hija- sonrió Gina -.Espero que vengas a vernos a menudo.
- Me encantará- .Asintió Calina- .Aunque ahora debo irme ya, muchas gracias por recibirme.
- A ti- repuso Gina cogiendo nuevamente en brazos a su hija que protestó con algún puchero por verse separada de su nueva amiga -.


El sonido del videófono volvió a inmiscuirse en la tranquilidad del momento. Gina se aprestó a encender la pantalla del aparato una vez más, descubriendo sorprendida y también muy contenta el rostro de su cuñado Erel.

-¡Hola!- saludó animadamente él -.
- Erel .¿Qué haces por aquí?.- Le preguntó Gina, bastante alegre de verle -.
- Ya lo ves- respondió él -. Tenía tiempo libre durante un par de días y me dije que podía ir a ver a mi sobrinita favorita.
-¡Claro!, no tienes otra- rió Gina que amablemente le indicó -.Pasa.


El muchacho obedeció .Calina entre tanto intervino, ya dirigiéndose hacia la puerta.


- Bueno, debo irme, no quiero inmiscuirme en cosas familiares.
-¡No seas tonta! -. Le dijo suavemente su anfitriona moviendo la cabeza a la par que le proponía - .¿Por qué no te quedas y tomas algo conmigo y con mi cuñado?.
- No quisiera ser una molestia, yo...- musitó la chica algo enrojecida por la timidez -.


Erel entraba en ese instante y lo primero que hizo después de sonreír al ver a Gina fue fijarse en aquella rubia y atractiva chica que le recordaba mucho a…


- Menra, me alegro de verte - declaró convencido de ello -.
- Lo siento- sonrió la muchacha poniéndose aún más colorada cuando rebatió.- No soy Menra.
- Perdone- repuso Erel sintiéndose envarado y sorprendido a la vez -.Es que se parece usted mucho a una amiga.
- Es fácil de explicar - intervino Gina visiblemente divertida -. Erel, esta chica es Calina Delaier, la hermana menor de Menra y Maga de Esil. Calina, este es Erel Rant, mi cuñado y ya sabes de quién es hermano.
- Si- asintió ella esbozando su encantadora sonrisa otra vez -. Estoy encantada de conocerle.
- Tutéame- le pidió Erel que añadió haciéndolo con lo propio -. Y dale recuerdos a tu hermana en cuanto la veas.
- Está con tu hermano, en esa misión diplomática - .Le recordó Calina -.Pero se los daré ,en cuanto pueda ,¡ojalá sea pronto!.
- Si, confiemos en que todo salga bien y se logre una buena relación con esos nephralers.
- Yener no confiaba mucho en ello- dijo Gina algo preocupada ahora -.
- Y no le culpo- convino Erel -.Él tiene la responsabilidad de velar por nuestro planeta y es prisionero de la historia.
-¿Prisionero de la historia?.- Inquirió Calina sin acertar a entender de que iba aquello -.
- Bueno, su Orden del Kail, al igual que la tuya de Esil, siempre se han distinguido por las luchas que mantuvieron contra ellos. Comprendo que ahora le será difícil hablar de paz y buenos deseos con sus antiguos enemigos, y mucho menos en el territorio de estos.
- Los tiempos cambian- terció Gina no dando a entender si lo decía de modo esperanzado o sarcástico -.


Erel asintió tomándolo en el sentido más literal, para dirigir su mirada hacia el parque.


-¡Vaya, si está ahí mi sobrina! - .Exclamó dedicándole su atención por completo a la niña- .Venía a verla y he dejado a la pobre olvidada.
- De veras- insistió Calina algo apurada -.Tengo que irme ya.
- Bueno, me alegra mucho haberte conocido y espero que pases a vernos con frecuencia- le reiteró Gina acercándose con ella hasta la puerta -.
- Si,- convino Erel añadiendo con interés -.¿Te alojas por aquí cerca?.
- Bueno, por ahora lo hago en la Sede de mi hermandad- respondió ella -.
- Pues hazle caso a Gina, vente por aquí un día de estos a comer con nosotros.- Le dijo él con desparpajo -.
- Sería estupendo- aseveró la cuñada del chico que le pidió a su interlocutora -.Danos la dirección de tu hermandad para que podamos llamarte.


Calina se la dictó a ambos que la anotaron en sus relojes agenda. Después la muchacha les saludó con la mano y salió de la casa. Erel que jugueteaba con su sobrina le comentó a Gina.


- Es una chica muy bonita y muy simpática .Desde luego físicamente es casi igual que Menra pero su carácter no se parece en nada.
- Es verdad- .Asintió ella evidenciando que era lo mismo que había pensado -.Me parece una buena chica aunque bastante tímida.


Su cuñado asintió de acuerdo con esa impresión en tanto gateaba siguiendo a la pequeña Samra.


- Y cuéntame Erel- le inquirió Gina observándole divertida -.¿Qué tal te van las cosas?.
-¡Oh, muy bien! - declaró este en tanto cogía a su sobrina y se levantaba con ella en volandas- .Los negocios no podrían ir mejor .Hemos establecido una red que abarca casi toda la confederación de tu planeta y nuestras inversiones prosperan. Sobre todo en Casiopenae. En estos dos últimos años ese planeta ha progresado mucho ,a raíz de sus tratados con Oumeya y con nuestra Cuádruple Alianza que tú bien conoces su capacidad militar se vio muy reducida, en consecuencia, el presupuesto que destinaban a ella también, y ese sobrante ha ayudado junto con los créditos que les hemos otorgado, a reactivar su economía. Están creciendo mucho y precisan de nuestros productos .Mi padre se ha metido también a invertir en el planeta y gestionamos algunas empresas importantes del sector. Y ahora, por si fuera poco, somos de los primeros que han llegado a acuerdos comerciales con los Nephralers.
- Si, ya había escuchado algo de eso- suspiró Gina quien recordaba habérselo oído comentar a su esposo a quien no había sentado demasiado bien precisamente que fueran sus propios familiares los que abrieran esos caminos -.
- Es más- agregó Erel -. Podría ir a Nephraler para terminar de perfilar los acuerdos después de que vuelva la legación diplomática de Yener.


Su cuñada le miró atónita pero no dijo nada .Erel añadió ahora con menos entusiasmo y más prevención.


- Escucha. Sé que a mi hermano no le gustó que empezásemos a tratar con ellos, pero él mismo admitió públicamente que estaban dispuestos a recorrer el camino hacia la paz duradera y la distensión. ¿Y qué mejor modo de hacerlo que trabando relaciones comerciales?. No nos engañemos Gina, es el dinero el que mueve a los mundos .¡Hasta Nephraler! .En eso mi padre tiene razón, lo he comprobado.
- Yo, en cambio, no estoy tan segura de eso- repuso Gina por fin tomando ahora ella a la cría en brazos para argumentar - .Desde que conocí a tu hermano me di cuenta de que existen otros valores muy importantes. Como las propias raíces y la tradición, el honor. No es que lo desconociera cuando vivía en Oumeya, es más, mi familia siempre se guió por cosas así, y por la búsqueda del beneficio colectivo, la tolerancia y la paz...
- Si, Gina - le respondió entre conciliatoria y cansinamente Erel -.Mi hermano tiene razón en muchas cosas .Es una persona admirable, siempre lo he pensado así. Hasta cuando éramos pequeños, casi nunca tuvimos problemas de celos ni envidias. Siempre estaba ahí para ayudarme .Pero él se educó de otro modo. Se pasó muchos años con los Monjes de Somer hasta hacerse uno de ellos .Siempre ha estado rodeado de las historias sobre las glorias pasadas .Luego, para colmo, se metió en el ejército y más de lo mismo. No digo que esté mal, al contrario, se ha labrado un porvenir del que todos estamos muy orgullosos. Y es un héroe para nuestro pueblo. Aunque a veces, escuchándole hablar, me parecía que las narraciones de los libros de historia de Somer cobrasen vida. Y me preocupo por él. ¡Por Alex! si incluso llegó a decirme que se le habían aparecido Skarn Dainlin y sus tropas.


Gina le miró ahora arqueando las cejas y respondió molesta.


- Eso no se lo inventa Erel, ni fue ninguna alucinación. Yo lo vi también, al igual que mi hermano y mi amiga Kyra, la que es ahora su esposa. Y ninguno de nosotros está loco.
- No por favor- le pidió Erel haciendo un espacio con las manos -.Nadie ha dicho eso. Pero ten en cuenta que mi hermano posee facultades mentales muy desarrolladas merced a su entrenamiento y que tu cuñada Kyra, según tengo entendido, también. Fácilmente os pudieron transmitir eso a tu hermano y a ti. Seguro que lo vieron pero puede obedecer a su percepción extrasensorial para visualizar acciones del pasado remoto .Nada más. O que su sensibilidad se disparase producto del estrés que habían sufrido .Podrán ser mil cosas .Pero creerse que le han designado casi por mandato divino me preocupa. La verdad. No me habría gustado sacar este tema, pero ahora que lo hemos hecho, entonces pensé que mi hermano necesitaba unas vacaciones apartado de Yumlaiance.
- A mí también me gustaría que pasara más tiempo conmigo y con Samra - convino Gina que no obstante arguyó para justificar a su esposo- .Pero Yumlaiance todavía precisa mucho de él. Y estar a nuestro lado es un lujo que mi marido no puede permitirse .De todas formas Erel. Si él te contó eso es porque confía en ti. ¡Eres su hermano! .No es algo que debas echarle en cara.- Remachó en tono de reproche -.
- Y no lo hago Gina- se defendió él -.Al contrario, me preocupa. Soy su hermano como tú bien dices y por esa misma razón no deseo que se vea envuelto en dificultades .Yo no diría nada de eso a nadie que no fuera de la familia .Sólo he hablado contigo de ello .Ni siquiera se lo he contado a mi madre.
- Bueno, vamos a olvidarlo- .Repuso conciliatoriamente ella- .Sé que tus intenciones son buenas y que te inquietas por Yener pero no creo que debas hacerlo en demasía.

Aunque Erel la miró de soslayo, suspiró y repuso con un tinte cuidadoso en su tono:


- Has de saber Gina que en nuestro mundo existen muchísimas personas que admiran a mi hermano y que le quieren y respetan pero asimismo hay otras que no se sienten demasiado afines a él.
-¿Qué quieres decir?- le interrogó ella ahora con el semblante más preocupado -.
- No quería habértelo dicho así. En realidad si me he pasado por aquí, aparte de para ver a la pequeña Samra, ha sido para avisarte.


Su cuñada era todo oídos, dejando a su hija nuevamente en el parque con sus juguetes se sentó ofreciéndole a Erel hacer lo propio, él aceptó en tanto añadía.


- Hay gentes, que se mueven en altos círculos de política y finanzas a quienes no hacen excesiva gracia las objeciones que plantea Yener en lo relativo a las conversaciones con Nephraler.
- Pero ¡por el amor de Maray! - exclamó Gina sin poder creer lo que escuchaba -. Son esos mismos que de siempre han defendido una gran flota de guerra para mantener a raya a los que hasta hace poco, según sus propias palabras, eran sus inveterados enemigos.
- Esas gentes se mueven por el mero interés- le aclaró Erel -.Ayer decían eso porque una flota amplia y operativa en un gran espacio les producía muchos beneficios, contratos ventajosos con el gobierno en materia de fabricación de naves, pertrechos y equipos. Hoy dicen lo contrario pues se han dado cuenta de que los nephralers tienen unas enormes posibilidades de mercado, inexploradas e inexplotadas para ellos .Y Yener, con sus continuos consejos de cautela y recelo hacia los Nephralers, al emperador y al gobierno, no hace sino demorar sus planes.
- Pero mi marido es el primero en desear que todo se arregle y que la paz impere para todos- objetó Gina -.
- Si, pero eso lo dijo después de mantener esa conversación con el nephraler que enviaron y con todo, se opuso a la designación del príncipe para dirigir la comitiva.
-¿Cómo sabes tú eso?.- Le preguntó Gina mirándole con incredulidad -.
- Lo dijo en una audiencia pública, con miembros del gobierno presentes. Las cosas se filtran .Esas personas tiene muchos contactos e intereses con el mundo empresarial.- Le explicó su cuñado con inquietud -.
- Entonces según tú ¿qué debería hacer Yener?.- Inquirió la muchacha visiblemente indignada- .¿Plegarse sin más a los deseos de esos tipos? .Decir, muy bien, lancémonos a comerciar a diestro y siniestro. ¿Quieren que les bendiga sin ninguna objeción ni cuidado ?.
- Gina,- suspiró Erel mirando hacia el techo como si se viese impotente para hacerla comprender - .Yener es un personaje muy popular e influyente en Yumlaiance e incluso en el resto de los mundos Aliados. Tiene amigos muy importantes. ¡Fíjate!. Es yerno de tus padres, claro esta, que son la presidenta del Consejo Federal de Oumeya y el general en jefe de su patrulla espacial .Conoce a destacados oficiales natacliers y aquí es casi una leyenda. Además de tener las simpatías de casi todo el mundo. Si alguien así no mira con buenos ojos ciertas actuaciones estas difícilmente prosperan .Los inversores se muestran reacios a sufragar proyectos y eso a las compañías les sienta fatal .El príncipe sin ir más lejos, es amigo personal de muchos de esos empresarios y de políticos con intereses en expandir sus negocios unos y su popularidad los otros .Por ello ha sido enviado para, más que hablar, comenzar a negociar con los nephralers.
-¡Pero si ha sido el mismo emperador quien le ha designado!- .Exclamó Gina escandalizada- .Ese hombre no mira tales cosas. Yener me lo ha dicho muchas veces.
- El emperador, pese a la apariencia que da de poder absoluto, no puede hacer lo que quiera. Nunca ha podido pues desde antiguo existieron cortes y mecanismos entre reinos que nivelaban sus actuaciones. Era y es, eso sí, un moderador entre todos los territorios que integran Yumlaiance. Una especie de “primum inter pares”, como diríais en tu planeta, si quieres llamarle así. Representa a nuestro pueblo dando la imagen de unidad que nuestro mundo necesita, y en momentos de crisis su opinión puede ser decisiva .Pero no gobierna de por sí. De eso se encargan el presidente y los otros miembros de su gabinete. Ellos decidieron que, precisamente por motivos de imagen y representatividad, se debía enviar al Príncipe .El emperador no es tonto .Tanto si le gusta eso como si no, accedió para dotar a nuestra comitiva de...digamos un carácter Imperial.
- Si hubiera ido Yener al frente habrían conseguido el mismo respeto o quizás más - Rebatió Gina -.
- No creas- le contradijo Erel que argumentó con evidente conocimiento de causa -.Mira, los magnates no se fían de tu marido en demasía. Saben que al primer indicio nephraler que le desagrade se cerrará en banda invocando hechos de hace dos mil años. ¡Y en eso tienen razón!. Mi hermano puede llegar a ser muy cerrado a veces .Además, los mismos Nephralers no le tienen excesiva simpatía a un señor del Kail y tiene informes de cómo es. Diríase que pueden temerle y con motivos .Por el contrario, un príncipe yumlaincer que además llega con propuestas comerciales muy interesantes debajo del brazo les inspira más confianza .¿Me vas entendiendo ya?.
-¿Quieres hacerme ver que todo esto no es más que un intercambio comercial encubierto?.- Repuso Gina todavía atónita y cada vez más desencantada -.


El chico asintió lentamente aunque matizando aquello.

- Por supuesto que se tocarán otros temas muy importantes para los que la presencia de mi hermano es necesaria, pero no voy a negar que el peso de los asuntos económicos es tan importante o incluso quizás más que el de los restantes puntos. Gina - añadió ahora con voz más pausada y mirando a su cuñada a los ojos -.Sé que esto te disgusta, créeme, a mí también pero te lo digo por el bien de todos, comenzando por el vuestro .Procura que Yener no se meta mucho. Si se mantienen al margen, tiene su vida y su futuro asegurados, al igual que el de toda su familia. A nosotros nos va de maravilla y no te pido solo que trates de disuadirle ni por mí ni por mis padres .Tú eres diplomática y me comprendes ,¿verdad?.


La muchacha guardó un pesado silencio sopensando aquellas palabras, no le había gustado nada lo que su cuñado le había desvelado pero pese a todo tuvo que asentir y prometerle a Erel que consideraría su consejo .Éste, satisfecho, le dio un beso a su cuñada y a su sobrina y se despidió dejando pensar a Gina en como le transmitiría aquello a Yener cuando éste volviera.


Por su parte y a miles de kilómetros de ellos el grupo de enviados yumlaincers se dirigían hacia la frontera de ambos espacios. Dentro de poco estarían en terreno de nadie y más allá les esperaría una nave nephraler para conducirles hacia su destino. Así las cosas, la nave en la que viajaban y sus escoltas disminuyeron progresivamente la velocidad cuando llegaron a la frontera. Allí se detuvieron esperando la comunicación con sus interlocutores.